BERLIN, 4 jul (Xinhua) -- La canciller alemana Angela Merkel defendió hoy el reciente compromiso logrado en la política alemana de asilo como medio para resolver los conflictos internos entre la gobernante Unión Democrática Cristiana (CDU) y la Unión Social Cristiana (CSU).
Merkel argumentó que las medidas de control fronterizo interno, solicitadas por el ministro del Interior y líder de la CSU Horst Seehofer, y la cooperación europea no son mutuamente excluyentes. Berlín ya firmó un acuerdo con Atenas para regresar a los refugiados que ya estaban en Grecia y, a cambio, Alemania recibirá a más solicitantes de asilo procedentes de Grecia de conformidad con los programas alemanes de reunificación familiar.
La líder de la CDU anunció además que Seehofer iniciará pronto conversaciones para firmar acuerdos similares con otros países. En consecuencia, en el futuro, los refugiados ya no podrán "simplemente elegir" en cuál país de la Unión Europea (UE) solicitarán asilo.
Merkel hizo los comentarios durante un discurso ante delegados en el Parlamento Federal después del dramático fin de un conflicto de gabinete que amenazaba con derrumbar su gobierno. Con anterioridad, el CDU y el CSU habían llegado a un muy publicitado callejón sin salida sobre si deberían regresar o no en la frontera alemana a los solicitantes de asilo que ya se hubieran registrado en otro país del Area de Schengen.
Seehofer quería negar el acceso a territorio alemán a los solicitantes de asilo que ya habían entrado de manera formal a la zona de Schengen por otro país, pero Merkel advirtió que habría un efecto dominó en el que los países vecinos de Alemania se apresurarían a cerrar sus fronteras internas.
Después de las amenazas de renuncia de Seehofer, los dos partidos lograron acordar el establecimiento de centros de tránsito en la frontera Alemania-Austria para detener a los solicitantes de asilo ya registrados en la UE y después organizar su transferencia al país miembro responsable.
Ambos prometieron "no actuar de forma unilateral" en el manejo de los centros de tránsito y buscar una estrecha cooperación administrativa con todos los países afectados.
"Así podremos preservar el espíritu de asociación en la UE y al mismo tiempo tomar una medida decidida para controlar la migración secundaria", dijo Merkel.
De acuerdo con Merkel, la supervivencia de la UE depende de si encuentra o no un enfoque compartido ante la política de asilo.