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La lucha de los estudiantes sordos ayuda a inspirar a los niños a desafiar la discapacidad

Jiang Mengnan asiste a una reunión en la Universidad de Jilin en Changchun, provincia de Jilin.

Beijing, 09/07/2018(El Pueblo en Línea) -La historia de Jiang Mengnan es una de triunfo sobre la adversidad. Sorda casi desde su nacimiento, ha superado innumerables obstáculos para lograr su sueño de estudiar y obtener un doctorado en una de las escuelas más prestigiosas de China.

Más importante aún, ella está ayudando a inspirar a los niños discapacitados en su provincia natal de Hunan para luchar por el éxito y desafiar las bajas expectativas que todavía tienen algunos en la sociedad.

Nacida en el seno de una familia de la etnia Yao en el condado Yizhang, el mundo de Jiang ha permanecido en silencio desde que tenía 6 meses de edad, cuando una medicina que le suministraron dañó irreparablemente su audición. Sin embargo, a través de la perseverancia, sobresalió en la escuela y la universidad. En otoño comenzará a estudiar para obtener un doctorado en farmacología en la Universidad de Tsinghua.

"He recibido mucha ayuda de otros a lo largo de los años. La mejor manera de pagarles es hacer algo bueno para la sociedad", dijo. "Debido a mi pérdida de audición, no podía ser médico. En cambio, elegí farmacia para poder ayudar a reducir el dolor de las personas y acelerar su recuperación".

Otra forma importante con la que la joven de 26 años quiere contribuir es enseñando a los niños en situaciones similares a no ser definidos por su discapacidad. Cada vez que puede, Jiang regresa a su ciudad natal para visitar las escuelas de educación especial y reunirse con los estudiantes.

"Les digo que hagan todo lo posible para lograr tanto como una persona sin discapacidad", dijo. "No necesitamos sentirnos inferiores debido a nuestros defectos. Una vez que lo intenten, descubrirán que las cosas no son mucho más difíciles que para otros niños. Y a veces incluso lo hacen mejor".

Y no es solo la actitud de los niños la que espera cambiar. Hizo hincapié en cómo el apoyo de los demás fue esencial en su propio viaje.

"Siempre estoy agradecida por el respeto que recibo de mis padres, maestros y amigos", dijo. "Nunca me dan una atención especial por mi 'imperfección', lo que significa que nunca me he visto a mí misma como alguien diferente".

Cuando Jiang era una niña pequeña, sus padres comenzaron a mostrarle cómo entender a las personas leyendo los labios. También le enseñaron a vocalizar poniéndose las manos en la garganta, para que pudiera sentir la vibración de sus cuerdas vocales.

Fue un proceso lento y laborioso, pero sus padres no se dieron por vencidos, y pronto Jiang comenzó a hablar.

"Mi madre dice que nunca olvidará el día en que dije 'Mamá' por primera vez. Tenía 16 meses", dijo. "No tengo pronunciación estándar, solo hago mi mejor esfuerzo para decir cada palabra con claridad para que la gente me entienda. Y cuando se trata de nuevos conocidos, necesito unos días para familiarizarme con sus movimientos bucales".

Cuando tuvo la edad suficiente, Jiang se matriculó en una escuela primaria estándar, no en una escuela especial, como era común para la mayoría de los niños discapacitados.

Ella dijo que fue difícil al principio. Durante las lecciones, los maestros solían escribir en la pizarra dando la espalda a los alumnos, por lo que Jiang no adquiría gran parte del contenido. Tenía que copiar todo en la pizarra y estudiar sola después de clase para mantenerse al día con sus compañeros de clase.

"Mis padres nunca me daban las respuestas directamente cuando hacía preguntas, lo que me ayudó a desarrollar la capacidad de pensar de forma independiente", dijo.

Después de graduarse de la escuela primaria, Jiang pidió asistir a la escuela secundaria No 6 en Chenzhou, una ciudad a unos 50 kilómetros de distancia. Al principio sus padres se negaron, "pero les dije que no podían protegerme toda mi vida", y le dieron el visto bueno.

En 2011, logró una puntuación impresionante en el examen de ingreso a la universidad nacional y fue admitida en la Universidad de Jilin en Changchun, provincia de Jilin. En la universidad, acumuló varios premios y becas por su destacada actuación y se ofreció como voluntaria para numerosas actividades benéficas. Ella visitó escuelas especiales durante sus vacaciones.

Después de graduarse en 2015, se convirtió en investigadora en la universidad, estudiando diseño de medicamentos asistidos por computadora.

"Después de una cuidadosa consideración, le aconsejé que se inclinase hacia una carrera de investigación basada en la informática", dijo el profesor Yang Xiaohong, que era el tutor de Jiang. "Tiene un potencial de desarrollo prometedor y no necesitaría llevar a cabo experimentos de laboratorio, lo que podría ser peligroso para alguien que no puede oír".

Jiang finalmente terminó su maestría y fue aceptada como candidata a doctorado en la Facultad de Ciencias de la Vida de la Universidad de Tsinghua.

"Mis profesores y compañeros de clase me han ayudado inmensamente durante mis estudios", dijo. "Cuando comencé mi maestría, era realmente difícil para mí entender nuevas terminologías simplemente leyendo los labios, por lo que mi tutor escribiría las palabras para mí.

"Quiero continuar la investigación científica en farmacología y aportar un valor real a la sociedad", añadió. "También espero poder ayudar a más personas que tienen las mismas experiencias que yo".