Una nueva herramienta financiera impulsará a las empresas privadas chinas

Pueblo en Línea  2018:10:24.14:16

China ha decidido establecer un nueva herramienta de apoyo a la financiación de bonos para ayudar a las empresas privadas en el dilema de la obtención de préstamos. [Foto: Xinhua]

Por Hu Yongqi

Beijing, 24/10/2018 (El Pueblo en Línea) - China ha decidido establecer una nueva herramienta de apoyo a la financiación de bonos para ayudar a las empresas privadas y atenuar el dilema de la obtención de préstamos.

Los expertos consideran que esta nueva medida puede estabilizar las expectativas y la confianza del mercado.

Durante una reunión ejecutiva, presidida por el premier Li Keqiang, el Consejo de Estado decidió establecer un instrumento de financiamiento que considere la comercialización de bonos para empresas privadas.

La declaración, publicada después de la reunión de este lunes, instruye que el Banco Popular de China, organismo rector, proporcionará el capital inicial a las instituciones que, a su vez se encargarán de proporcionar un mayor apoyo crediticio a las empresas privadas que, aunque están bien operadas, a corto plazo enfrentan problemas de liquidez.

Los participantes en la reunión coincidieron en fortalecer los servicios financieros para las pymes, mediante una mayor refinanciación y el apoyo del redescuento. Los bancos comerciales y los capitales de seguros se integrarán para establecer un eficaz mecanismo de distribución de riesgos.

La declaración subraya que China apoya firmemente el sector de la propiedad pública. Asimismo, alienta, apoya y guía -de forma inquebrantable- el desarrollo de la economía no pública. En virtud de su ley de propiedad, la nación garantiza el uso igualitario de los factores de producción, la competencia leal y la protección correspondiente.

Las empresas privadas son vitales para el desarrollo económico y social de China. En este sentido, se promulgarán políticas más favorables para lograr su desarrollo estable y saludable, precisa la declaración del Consejo de Estado.

La nueva herramienta se ocupará de los bonos emitidos por empresas privadas con grandes mercados, perspectivas de negocio y tecnológicamente competitivas, explicó la autoridad bancaria en su portal digital. Ese mismo lunes, el Banco Central inyectó 150 mil millones de renminbi (1,6 mil millones de dólares estadounidenses) para el refinanciamiento y el redescuento de este modalidad comercial.

Dong Ximiao, investigador principal del Instituto Chongyang de Estudios Financieros de la Universidad Renmin de China, indicó que los problemas de liquidez es una de las principales dificultades que frena el desarrollo de las empresas privadas. Si se toman en cuenta las complejas circunstancias internas y mundiales, hay que alentar a las instituciones financieras para que proporcionen ese apoyo vital e implementen políticas monetarias favorables.

“Apoyar a las empresas privadas para que emitan bonos comercializables es beneficioso porque estabiliza sus expectativas y aumenta la confianza en el mercado”, indicó Dong. “También promoverá el saludable desarrollo del mercado de bonos, que desempeñará un papel vital en la financiación directa.”

Recientemente, el gobierno central ha priorizado el alivio a las dificultades financieras de las pymes privadas. El 22 de agosto, durante una reunión ejecutiva del Consejo de Estado, se decidió alentar a las instituciones financieras para que aumenten sus préstamos a las pymes y reduzcan los costos operativos propios de esa actividad.

Liu He, viceprimer ministro de China, detalló que las empresas privadas aportan más del 50 por ciento de los impuestos globales, más del 60 por ciento del PIB de China, más del 70 por ciento de la innovación tecnológica y más del 80 por ciento del empleo urbano.

Durante la reunión de la Comisión de Estabilidad Financiera y Desarrollo del Consejo de Estado, efectuada este sábado y presidida por Liu, se pidió fortalecer la vitalidad de las entidades microeconómicas, especialmente las empresas privadas con problemas financieros. Asimismo, se instó a que las instituciones financieras no denieguen préstamos a las empresas que tienen grandes perspectivas y son tecnológicamente competitivas, aunque se encuentren en dificultades temporales.