Última hora:  
español>>Sociedad

Historia de familia de maquinistas refleja "la velocidad de China"

Actualizado a las 16/02/2019 - 14:34
Palabras clave:

LANZHOU, 15 feb (Xinhua) -- Durante la temporada alta de viajes por la Fiesta de la Primavera, conocida como "chunyun", Zhang Chao conduce con mucho cuidado el tren de Lanzhou, capital de la provincia noroccidental china de Gansu, a la ciudad de Dunhuang, en la misma provincia.

El joven maquinista está trabajando durante la temporada más ocupada del año, ya que se estima que el volumen de pasajeros durante el "chunyun" podría superar los 410 millones de viajes.

Zhang, de 30 años, heredó la profesión de su abuelo y su padre, y es testigo de la creciente velocidad de los trenes en el país asiático.

"Tengo mucha suerte si me comparo con mi abuelo o con mi padre. Nos encontramos en un importante periodo para el desarrollo de ferrocarril de nuestro país", subraya.

El abuelo de Zhang, Zhang Ganchen, de 79 años, forma parte de la primera generación de maquinistas en la nueva China. Solía conducir un tren de vapor que pasaba por bosques durante casi 50 años.

En 1958, Zhang Ganchen se matriculó para ser maquinista después de ver una nota de reclutamiento en la que se animaba a la gente a apoyar el desarrollo de la parte occidental del país.

En 1970 Zhang se puso a los mandos de un tren de vapor y empezó a transportar los artículos necesarios para el desarrollo económico del país, que en aquella época eran petróleo o acero.

Zhang, como representante de los maquinistas de la antigua generación, era capaz de permanecer despierto toda la noche, soportar el hambre, el frío y el calor, e incluso reparar el tren él mismo.

Influido por su padre, Zhang Limin, también se convirtió en maquinista en 1992. Dos años después, empezó a llevar locomotoras con motores diesel.

"En invierno, los motores de diesel tienen calefacción, y en verano podemos disfrutar de los ventiladores en los trenes", recuerda Zhang Limin, quien ha estado a los mandos de dos tipos de trenes totalmente diferentes.

Además, la velocidad de los trenes ha ido aumentando con el paso del tiempo. Mientras que su padre solía necesitar diez horas para completar 200 kilómetros, el hijo sólo necesitaba la mitad del tiempo para finalizar el trayecto.

En 2003 China propuso acelerar el desarrollo del ferrocarril. Durante el XI Plan Quinquenal (2006-2010), la longitud de líneas férreas registrada por todo el país alcanzó los 91.000 kilómetros.

En opinión de Zhang Limin, ellos han sido testigos, participantes y beneficiarios de la aceleración del ferrocarril chino.

Desde 1997 al 2007, la velocidad del ferrocarril chino se ha acelerado en seis ocasiones. Los trenes de alta velocidad, que han pasado de 200 a 350 kilómetros por hora, han entrado en la vida diaria del pueblo chino.

A Zhang Chao, por el contrario, no le gustaban los trenes cuando era niño, ya que su abuelo y su padre tenían lo que él llamaba la "enfermedad de la profesión", no contaban con un horario regular y no se podían reunir con su familia.

Sin embargo, el joven no ha podido escapar del destino familiar.

En 2015 Zhang Chao se convirtió en un maquinista al frente de una locomotora eléctrica tras más de dos años de estudio y práctica.

El año pasado Zhang Chao aprobó el examen para conducir los trenes bala y podrá ponerse a los mandos de uno de ellos este año.

El secretario del comité del Partido Comunista de China de la sección Jiayuguan de la Corporación de Ferrocarril de Lanzhou, Wang Jiangong, afirma que durante los últimos años el ferrocarril chino ha registrado un enorme cambio, lo que ha creado "la velocidad de China".

"Antes, los maquinistas conducían con su experiencia y técnica, ahora contamos con tecnologías y administración más avanzadas, lo que nos permite a ofrecer un servicio más cómodo", destaca Wang.

De acuerdo con Zhang Chao, la seguridad es el factor más importante para los maquinistas de la nueva generación, mientras que sus antecesores profesionales, como su abuelo y su padre, se enfocaban más en sus destrezas, al reducción del tiempo de reparación de los trenes y el ahorro de recursos para el país.

El joven padre y su esposa siempre compran trenes de juguete para su hijo, que tiene un año. "A lo mejor también le gustan los trenes y quiere ser maquinista. Y si toma esa decisión, lo apoyaré", asegura Zhang.

Comentario

Noticias relacionadas:

PTV videoMás

Cómo celebrar el Festival de la Primavera: lo que uno debe o no debe hacer

EnfoqueMás