BEIJING, 15 feb (Xinhua) -- China y Estados Unidos acaban de concluir una nueva ronda de conversaciones comerciales de alto nivel en Beijing.
Una serie de señales positivas salidas de la reunión han demostrado que sobre la base de la igualdad, los dos países están avanzando hacia un acuerdo final, guiados por los consensos logrados por los dos jefes de Estado.
Al reunirse con los delegados negociadores de Estados Unidos hoy viernes, el presidente chino Xi Jinping dijo que China está lista para resolver las disputas comerciales a través de la cooperación y a llegar a un acuerdo que sea aceptado por ambas partes.
Esta es la primera reunión del presidente Xi con los delegados comerciales de Estados Unidos desde el agravamiento de las fricciones. Por lo tanto, nunca ha sido tan importante mostrar seriedad con respecto a esta ronda de conversaciones de alto nivel.
En los últimos días, los equipos negociadores han trabajado horas extras para profundizar el entendimiento mutuo en temas de interés común, incluyendo transferencia de tecnología, protección de los derechos sobre la propiedad intelectual, las barreras no arancelarias y el comercio equilibrado.
Las dos partes llegaron a un consenso en principio sobre temas importantes. También realizaron discusiones específicas con respecto a un memorándum de entendimiento sobre temas económicos y comerciales bilaterales.
Se puede decir sin temor a equivocarse que los acuerdos van en aumento y que los desacuerdos están disminuyendo. Se está generando un optimismo cauteloso en cuanto que las dos partes llegarán a un acuerdo mutuamente beneficioso en el menor tiempo posible.
Los consensos logrados por los dos jefes de Estado sientan las bases para que China y Estados Unidos solucionen las fricciones.
Los madatarios de los dos países tienen múltiples medios para profundizar el entendimiento mutuo. En diciembre pasado, el presidente Xi y su homólogo estadounidense, Donald Trump, se reunieron en Buenos Aires, Argentina, para llegar a importantes consensos. Posteriormente hubo conversaciones telefónicas y cartas de felicitación entre ellos. Todo esto ha ayudado a trazar el rumbo de las relaciones China-Estados Unidos en la siguiente fase.
Si hubiera una varita mágica para resolver las fricciones comerciales entre China y Estados Unidos, ésta sería la sinceridad y la acción. China y Estados Unidos tienen más intereses comunes que diferencias. Su demanda de cooperación es mayor que la fricción. La cooperación es la mejor opción para ambos.
A sólo dos semanas de la fecha límite del 1 de marzo, China y Estados Unidos están acelerando las negociaciones. Una nueva ronda de conversaciones comenzará la próxima semana en Washington. Si las dos partes se encuentren a mitad de camino, ambas se acercarán más al objetivo final.
A pesar de los avances, la negociación enfrenta desafíos e incertidumbres. Sin importar lo que ocurra al final, China defenderá su dignidad nacional y sus intereses fundamentales.
Esperemos el mejor resultado y que China haga todo por lograrlo, pero es igualmente importante estar preparados para lo peor.