CARACAS, 26 feb (Xinhua) -- El presidente venezolano, Nicolás Maduro Moros, acusó la noche de este martes a grupos de "delincuentes" y "criminales" presuntamente ordenados por el gobierno de Colombia, de incendiar los vehículos pesados que contenían la "ayuda humanitaria" que envió el gobierno de EEUU a Venezuela.
Según voceros de la oposición venezolana, el ingreso a Venezuela de la referida "ayuda humanitaria" estaba previsto para el pasado 23 de febrero, pese a que la entrada de los insumos no contaba ni cuenta con el aval del gobierno venezolano.
"Trataron de montar el falso positivo de que supuestamente el pueblo bolivariano de Venezuela había quemado unas gandolas (vehículo de carga) que traían comida podrida, fueron ellos mismos, fueron sus criminales los que quemaron las gandolas", dijo Maduro en referencia al pasado sábado.
El jefe de Estado venezolano condenó además que la oposición de su país, junto a autoridades de Colombia, y Estados Unidos, querían "meter a la fuerza" el lote de insumos, y dijo que "a Venezuela no pasaron ni pasarán jamás".
"La orden del gobierno colombiano fue quemar los camiones para echarle la culpa a Venezuela y escalar, pedir una intervención militar directa, como hicieron ese sábado 23 en la tarde y en la noche, salieron a pedir una intervención militar", manifestó el presidente Maduro desde Caracas.
Maduro además hizo un llamado "al pueblo de Colombia a que denuncie y rechace el intento de una invasión imperialista de EEUU desde Colombia contra Venezuela".
Felicitó al pueblo venezolano de la localidad fronteriza y a los organismos de seguridad, "por haber defendido victoriosamente la frontera de Venezuela" y denunció que, tras hacer pesquisas a los vehículos incendiados en el paso fronterizo ubicaron que los mismos también transportaban material para generar violencia.
Denunció que grupos opositores "tenían la intención de comenzar a distribuir todo ese material para generar disturbios en toda la extensión del estado fronterizo de Táchira, en todos los pueblos de la frontera" y escalar un conflicto.
Por último, Maduro reiteró que "Venezuela quiere paz, y está dispuesta a todo por defender el derecho a la paz".