Un aldeano camina más allá de la central fotovoltaica Pingjing, en Weining, provincia de Guizhou, el 13 de marzo del 2018. Además de la educación y la atención sanitaria, el gobierno chino también atiende algo igualmente importante para las zonas rurales: los aseos sanitarios. La segunda economía más grande del mundo se encuentra en medio de una "revolución de los servicios sanitarios”, lanzada en el 2015 para mejorar los baños de todo el país. Este año, China ha anunciado planes para instalar o renovar los inodoros de 10 millones hogares rurales en 30.000 aldeas. Se espera que la asignación del fondo por el Gobierno Central sea de 7 mil millones de renminbi (alrededor de 1,04 mil millones de dólares estadounidenses). La revolución de los servicios sanitarios es apenas una parte de una grandiosa estrategia de revitalización rural, destacada durante el XIX Congreso Nacional del Partido Comunista de China, celebrado en el 2017 y que, desde entonces, en repetidas ocasiones ha sido mencionada por el liderazgo chino. La estrategia tiene como objetivo lograr la modernización básica de la agricultura y las zonas rurales para el 2035, y concretar -para el 2050- el gran objetivo de tener una agricultura fuerte, un hermoso campo y agricultores con buena calidad de vida. (Foto: Xinhua/ Yang Wenbin)