NUEVA YORK, 29 may (Xinhua) -- Una serie de estampillas postales se emitió este miércoles en una ceremonia realizada en Nueva York para conmemorar el 150 aniversario del primer ferrocarril transcontinental, cuya construcción contó con la gran contribución de miles de trabajadores chinos.
La ceremonia fue organizada por Grace Meng, miembro de la Cámara de Representantes de Estados Unidos. A ella se unieron funcionarios de los servicios postales de EEUU y del Museo de los Chinos en Estados Unidos para rendir homenaje a los trabajadores inmigrantes chinos.
"La historia de los trabajadores ferroviarios chinos es una historia que debe ser contada, y hoy estamos haciendo exactamente eso", dijo Meng en el evento.
El ferrocarril, el primero de su tipo en conectar el país de costa a costa, tenía más de 3.000 kilómetros de longitud. Durante mucho tiempo ha sido reconocido como una de las obras de ingeniería más notables del siglo XIX. Después de su finalización, el ferrocarril redujo el tiempo de viaje a través del país de seis meses a solo una semana.
Unos 12.000 trabajadores chinos ayudaron a construir el ferrocarril en condiciones extremadamente peligrosas y difíciles entre 1865 y 1896.
Durante ese tiempo, los trabajadores chinos, que constituían más del 80 por ciento de la fuerza laboral de Central Pacific Railroad Company, tenían como tarea los trabajos más difíciles y peligrosos, pero eran muy mal pagados.
Meng no aprendió mucho sobre historia cuando era niña, pero una de las razones por las que impulsó la emisión de las estampillas es que quería asegurarse de que "las generaciones futuras conozcan y entiendan el profundo impacto que estos trabajadores ferroviarios chinos han tenido en este país".
Meng dijo que si bien a menudo se mencionan los beneficios económicos que trajo el ferrocarril, casi siempre se olvida la sangre y los esfuerzos de los trabajadores chinos del ferrocarril.
"Mientras trabajaban en las sierras, los trabajadores chinos atravesaban ríos embravecidos colgados en cestas a 2.000 pies, durante dos de los inviernos más fríos de la historia, con el fin de romper la impenetrable montaña de granito y dar paso a los rieles", dijo Meng, enfatizando en las duras condiciones de trabajo.
Algunos de los descendientes de los trabajadores del ferrocarril transcontinental asistieron a la ceremonia.
Uno de ellos, llamado Larry Lee, dijo que su tatarabuelo era "uno de los miles de chinos que no tenían nombre ni rostro para el mundo exterior" y que "finalmente son recordados como héroes que unieron y construyeron Estados Unidos".
Dos del juego de tres sellos postales de Transcontinental Railroad Forever muestran las locomotoras Jupiter y la No. 119 que impulsaron a los trenes que llevaban a los funcionarios e invitados de las dos compañías de trenes a la Ceremonia Golden Spike. La otra estampilla representa la famosa espiga dorada que fue una parte prominente de la ceremonia.
Frances Wong, directora del Instituto Asiático de Salud del Hospital Metodista de Nueva York, asistió a la ceremonia como miembro de la comunidad chino-estadounidense.
"Estoy muy, muy entusiasmada con las estampillas. Creo que los sellos postales ayudarán mucho a las personas a comprender cuánto hemos contribuido a la historia en Estados Unidos y lo que hemos hecho para ayudar a que Estados Unidos crezca", dijo Wong.
Ann Ko, del Distrito de Nueva York del Servicio Postal de Estados Unidos, señaló que era importante poder reflexionar sobre los trabajadores que construyeron el ferrocarril.
"Esos trabajos ayudaron a atar a las familias, las fronteras y las economías de dos costas", precisó Ko.