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Beijing, 21/05/2019 (El Pueblo en Línea) - Un número creciente de empleados de cuello blanco compran más alimentos elaborados y cocinan menos en casa, ha revelado un reciente estudio.
El 42,5 por ciento de los entrevistados nacidos después de 1990 cocinan menos de cuatro veces por semana. Y el porcentaje de ellos que cocinan menos de tres veces es mucho más alto que otros grupos de edad, indicó los resultados de una investigación sobre el consumo en China de alimentos elaborados.
“Debido al ritmo acelerado de la vida moderna y las nuevas tendencias de consumo, cada vez hay menos personas que cocinan en casa o comen en restaurantes. En cambio, los servicios de comida para llevar son cada vez más populares”, destacó Lai Yang, investigador de las tendencias de consumo y especialista de la Cámara General de Comercio de China.
Para el desayuno, los empleados de cuello blanco generalmente compran bollos al vapor, sushi y leche de soja, que se pueden adquirir en las tiendas de conveniencia que están situados de camino al trabajo.
Se llama tiendas de conveniencia a los establecimientos con menos de 500 metros cuadrados, abierto más de 18 horas diarias y los 365 días del año.
A veces estos trabajadores también compran el almuerzo y la cena en el mismo tipo de tienda. Por lo general, suelen gastan menos de 20 renminbi por cada comida.
Esta nueva tendencia de consumo, a su vez, está reestructurando el mercado de la gastronomía. Entre el 2016 y el 2018, las tiendas de conveniencia crecieron mucho más rápido que toda la industria minorista, manteniendo una tasa de crecimiento promedio del 18 por ciento, detalló una lista sobre las 100 mejores tiendas de conveniencia en China, elaborada por la China Chain Store y la Asociación de Franquicias de China.
Por ejemplo, el crecimiento anual promedio de Bianli Feng, una marca dentro del género de tienda de conveniencia, ha aumentado diez veces. Debido a que fue la primera tienda en vender comidas envasadas calientes en varias ciudades chinas, siempre cuida mantener el equilibrio entre el sabor, los ingredientes y el precio. Además, Bianli Feng habilitó zonas de consumo en cada unidad.
Cada fase de la línea de producción se esfuerza por mantener una comida sana y segura. Las verduras y la carne en las tiendas de conveniencia provienen de proveedores certificados como la Corporación Nacional de Cereales, Aceites y Alimentos. Además, la entrega y el almacenaje son monitoreados continuamente para que los alimentos vendidos en las tiendas estén siempre frescos.
Además de las facilidades de consumo, los jóvenes también quieren calidad. Esta dinámica plantea nuevos desafíos al sector.
Si logran mantener un constante perfeccionamiento en función del cliente, los especialistas consideran que las tiendas de conveniencia se convertirán en la primera opción gastronómica para los trabajadores jóvenes.