Criminal de guerra japonés confiesa haber torturado a chinos

Actualizado a las 04/08/2014 - 14:55

Palabras clave：guerra japonés

BEIJING, 4 ago (Xinhua) -- La confesión de un criminal de guerra japonés, publicada ayer domingo, muestra detalladamente cómo éste participó en la captura, tortura y persecución del pueblo chino durante la guerra de agresión de Japón contra China.

Se trata de la última de un serie de confesiones publicadas en la página web de la Administración Estatal de Archivos (AEA) de China.

Según Saburo Shimamura, quien servió como miembro de los servicios secretos "Manchukuo" en los años treinta y cuarenta del siglo pasado, él mismo efectuó el arresto de cientos de chinos y prestó asistencia en algunas de las muertes.

En febrero de 1939, Saburo mandó capturar a más de cien personas involucradas en "una organización clandestina del Partido Comunista en el distrito de Yilan".

Saburo dijo que "tras los interrogatorios con tortura, un patriota murió; otro se suicidió tirándose en el río Songhua cuando estaba siendo trasladado a Jiamusi", una ciudad de la provincia de Heilongjiang, en el nordeste de China.

En octubre de 1939, Saburo "arrestó a más de cien patriotas condenados a prisión por levantamientos". Entre ellos, más de diez fueron sentenciados a muerte.

En noviembre, torturó a un chino hasta la muerte en el distrito de Tangyuan para adquirir información sobre un agente soviético que vivía allí.

De febrero a julio de 1941, "durante mi mandato en el distrito de Zhaozhou, detuve a un total de unas 200 personas, 70 de las cuales fueron enviadas al tribunal y 30 fueron sentenciadas a muerte", según la confesión escrita de Saburo.

Se trata de la trigésima segunda de las 45 confesiones de los criminales de guerra japoneses que la AEA planea publicar. Ha estado emitiendo una cada día desde el 3 de julio.

La medida responde a la negación de los crímenes de guerra del premier japonés, Shinzo Abe, y los políticos de derecha japoneses.