El gobierno británico condenó hoy el asesinato de David Haines, un trabajador asistencial británico que fue secuestrado el año pasado en Siria, calificándolo como "acto de maldad pura".
El grupo Estado Islámico (IS) difundió anoche un video mostrando la decapitación de Haines, el tercer cautivo occidental en ser asesinado por ese grupo en semanas recientes.
La Oficina británica del Exterior y la Commonwealth dijo que todos los signos muestran que el video es genuino.
"Hay un despreciable y espantoso asesinato de un trabajador asistencial inocente. Es un acto de maldad pura", declaró el primer ministro David Cameron en un comunicado. "Haremos todo lo que esté en nuestro poder para atrapar a esos asesinos y garantizar que enfrenten la justicia, no importa cuánto tarde".
El viceprimer ministro británico Nick Clegg condenó el asesinato de David Haines calificándolo como "un crimen del tipo más horrendo".
"Esta organización asesina se autodenomina Estado Islámico. Pero no es un Estado, es un equipo terrorista brutal cuyas acciones son una ofensa para cada musulmán amante de la paz en el mundo", dijo Clegg.
"El gobierno británico no descansará hasta que esos asesinos enfrenten la justicia", añadió.
Entre los líderes de gobiernos occidentales que condenaron el asesinato, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, dijo que Estados Unidos trabajará con Reino Unido y con otros países para "llevar ante la justicia a los perpetradores de este horrible acto".
El grupo miliciano Estado Islámico, con presencia en Siria e Irak, decapitó recientemente a dos periodistas estadounidenses.
Un miliciano enmascarado del IS que aparece en el video difundido el sábado por la noche, señala que la ejecución de Haines es en represalia por la promesa del primer ministro británico David Cameron de sumarse a la coalición encabezada por Estados Unidos para combatir al IS.
El hombre enmascarado, con el mismo acento británico que se escucha en los anteriores videos de decapitaciones, advierte a Cameron de su reciente retórica sobre los esfuerzos para derrotar al grupo, diciendo que tiene que "pagar el precio" por su promesa.
Al final del video, el miliciano amenaza con matar a otro rehén británico, llamado Alan Henning, si Cameron continúa apoyando la lucha en contra del Estado Islámico.