NACIONES UNIDAS, 24 sep (Xinhua) -- La Organización de las Naciones Unidas quiere que la Cumbre sobre el Cambio Climático "haga historia" y no sólo "hable", aseguró el martes en la sede del organismo internacional su secretario general, Ban Ki-moon.
"Debemos situar al mundo en una nueva senda", afirmó Ban al inaugurar la cumbre de un día de duración. "El cambio climático es el asunto definitorio de nuestra época. Está definiendo nuestro presente. Nuestra respuesta definirá nuestro futuro", aseveró.
Como el mundo no se ha enfrentado nunca con un desafío así, ni se ha topado tampoco con una oportunidad tan buena, un futuro con un bajo consumo de carbono y un clima resistente será un futuro mejor, más limpio, más sano, más justo y más estable, expuso.
El máximo representante de la ONU apeló a que todos los gobiernos se comprometan a alcanzar un acuerdo climático significativo y universal el próximo año en París, y a que hagan una contribución justa para limitar la subida de la temperatura global a menos de 2 grados Celsius.
Ban también pidió a la cumbre catalizar la acción para reducir las emisiones contaminantes, reforzar la resistencia del clima y movilizar la voluntad política.
Además, expresó su esperanza de que los líderes utilicen lo que se llevan de esta sesión para ampliar los compromisos en la reunión que se celebrará en Lima, capital de Perú, en diciembre en preparación de la conferencia de París.
Por su parte, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó en su discurso en la ceremonia de apertura que las "señales de alarma siguen sonando y los ciudadanos siguen avanzando; no podemos fingir que no los oímos".
"No podemos condenar a nuestros niños y a sus hijos a un futuro que está más allá de su capacidad de repararlo", enfatizó.
También intervino el primer ministro británico, David Cameron, que llamó a apoyar el crecimiento verde. "Si conseguimos esto no habrá necesidad de una compensación entre el crecimiento económico y la reducción de emisiones de carbono", señaló.
"Debemos dar a los negocios la certeza de que se necesitan para que inviertan en un bajo consumo de carbono", expuso Cameron.
"Esto significa luchar contra los económica y ambientalmente perversos subsidios a los combustibles fósiles, que distorsionan el libre mercado y saquean a los contribuyentes. Esto significa abogar por un libre comercio verde, recortando los aranceles en cosas como los paneles solares, y significa brindar a los negocios la flexibilidad para que elijan las tecnologías adecuadas para sus necesidades", manifestó.
El presidente francés, Francois Hollande, señaló que su país contribuiría con 1.000 millones de dólares estadounidenses al fondo global Clima Verde para ayudar a la naciones en vías de desarrollo a adaptarse a los efectos del cambio climático.
El viceprimer ministro chino Zhang Gaoli, enviado especial a la Cumbre del presidente Xi Jinping, dijo que la nación "se enfrenta a la ardua tarea de hacer crecer la economía, mejorar las vidas de sus ciudadanos y proteger el medio ambiente". China hará, no obstante, esfuerzos aún mayores para abordar el cambio climático de manera más efectiva, añadió.
"Como un país principal responsable, China realizará un esfuerzo aún mayor para abordar de manera más efectiva el cambio climático y asumir las responsabilidades internacionales que se correspondan con sus condiciones nacionales, etapa de desarrollo y capacidades actuales", dijo.
Por otro lado, la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, afirmó que "los costes de hacer frente al cambio climático son altos, pero los beneficios los superan de largo".
"Debemos dejar atrás la lógica de que la prevención del cambio climático impacta negativamente a la economía", añadió Rousseff. "Las medidas para reducir las emisiones y promover la adaptación deben ser consideradas una fuente de riqueza, ya que atraen inversión e impulsan nuevas iniciativas de desarrollo sostenible".
Rechazó también el modelo de los países desarrollados, el cual se basa en altas cuotas de emisiones dañinas debidas a la deforestación y el maltrato al medio ambiente.
"No queremos emular este modelo (...) Pero no negaremos la necesidad de reducir las desigualdades y mejorar el nivel de vida de nuestros pueblos", dijo Rousseff.
El primer ministro de Antigua y Barbuda, Gaston Browne, describió el efecto del cambio climático para países como los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (SIDS, por sus siglas en inglés).
"Hemos pagado y continuamos pagando un precio muy alto", dijo Browne.
"Nosotros, como muchos otros SIDS, contribuimos en una parte mínima a las condiciones que causan el cambio climático. Somos víctimas del derroche de otros. No debería sorprender a nadie, por tanto, que el pueblo de Antigua y Barbuda, al igual que los pueblos de otros SIDS, esté frustrado", dijo.
"Están enfadados porque, pese a sus esfuerzos para desarrollar las economías, pese a sus esfuerzos para construir infraestructuras que incrementen la productividad para soportar los impactos actuales y ralentizar esfuerzos inciertos, pese a sus esfuerzos para construir las bases para una vida mejor a sus hijos y nietos, los efectos devastadores del cambio climático destruyen su trabajo y les hacen retroceder año tras año, desviando nuestro camino hacia el desarrollo sostenible", comentó Browne.