ESTIMADOS DIPUTADOS:
En nombre del Consejo de Estado, voy a presentar ante esta Sesión de la Asamblea el Informe sobre la Labor del Gobierno, para que ustedes lo examinen y los honorables miembros del Comité Nacional de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino hagan sus observaciones.
I. MIRADA RETROSPECTIVA A LOS TRABAJOS DEL 2014
En este último año, el ambiente internacional y nacional al que se enfrentó nuestro país en su desarrollo fue complejo y serio. La recuperación de la economía global se mostró difícil y tortuosa, mientras que en el rumbo de desarrollo de las principales economías se produjo una diferenciación. La presión del crecimiento descendente de la economía nacional siguió aumentando y se entrelazaron múltiples dificultades y desafíos. Bajo la firme dirección del Comité Central del Partido, con el camarada Xi Jinping como secretario general, el pueblo de todas las etnias del país, unido en una sola voluntad, superando las dificultades y asaltando las plazas fuertes, cumplió las principales metas y tareas del desarrollo económico y social fijadas para todo el año, dio sólidos pasos en la consumación de la construcción integral de una sociedad modestamente acomodada, emprendió con buen pie la profundización integral de la reforma, inició una nueva marcha en la gobernación integral del país según la ley y logró nuevos avances en el disciplinamiento integral y riguroso del Partido.
El año pasado, el desarrollo económico y social de nuestro país marchó en general con paso seguro e hizo progresos sobre la base de la estabilidad. La principal señal de la estabilidad consistió en que el funcionamiento económico permaneció dentro de unos límites razonables. Estabilidad en el ritmo de crecimiento: el PIB alcanzó los 63,6 billones de yuanes, un 7,4% más que en el ejercicio precedente, lo que nos permitió situarnos en las primeras filas de las principales economías del mundo. Estabilidad en el empleo: en las ciudades y los poblados se crearon más de 13,22 millones de empleos, cifra superior a la del año precedente. Estabilidad en los precios: el alza del índice de los precios al consumidor (IPC) fue del 2%. Todos estos progresos comparten el siguiente rasgo distintivo general: la acentuación de la coordinación y la sostenibilidad del desarrollo. La estructura económica experimentó una nueva optimización: la producción de cereales, leguminosas y tubérculos llegó a 605 millones de toneladas; la tasa de contribución del consumo al crecimiento económico subió tres puntos porcentuales, llegando hasta el 51,2%; el porcentaje del valor agregado del sector servicios se elevó del 46,9 al 48,2%; y emergieron sin cesar nuevas industrias, nuevas modalidades operativas y nuevos modelos comerciales. El ritmo de crecimiento de la economía de las regiones centrales y occidentales fue más rápido que el de las regiones orientales. La calidad del desarrollo protagonizó nuevas elevaciones: los ingresos del presupuesto público ordinario aumentaron un 8,6%; la proporción del PIB correspondiente a los gastos en investigación, experimentación y desarrollo superó el 2%; y la intensidad del consumo de energía bajó un 4,8%, la mayor disminución registrada en los últimos años. La vida del pueblo experimentó nuevas mejoras: el crecimiento real de los ingresos per cápita disponibles de la población nacional fue del 8%, superando al crecimiento económico; los ingresos per cápita disponibles de la población rural aumentaron un 9,2%, es decir, más que los de los habitantes urbanos; la población rural necesitada se redujo en más de 12,32 millones; se resolvió el problema de la seguridad del agua de bebida a más de 66 millones de habitantes de las zonas rurales; y el volumen del turismo emisor rebasó los 100 millones de viajeros. La reforma y la apertura lograron nuevos avances rompedores, empezaron a ejecutarse una serie de tareas prioritarias de la profundización integral de la reforma y el actual Gobierno cumplió con anticipación su objetivo de reducir en una tercera parte los asuntos sujetos al examen y la aprobación administrativos. Ciertamente, no fue fácil conseguir esta lista de calificaciones, no en vano en ella se hallan condensados el sudor y la sangre del pueblo de todas las etnias del país, lo que contribuyó a fortalecer nuestra decisión y confianza de avanzar con valentía.
A lo largo del año pasado, las dificultades y los desafíos fueron mayores de lo previsto. Sin embargo, resueltos a salir al encuentro de las adversidades, realizamos principalmente los siguientes trabajos.
1. Puesta en práctica de un control con objetivos bien definidos sobre la base de un control ejercido dentro de los límites establecidos para mantener el crecimiento estable de la economía. Ante el aumento de la presión originada por el crecimiento descendente de la economía, permanecimos firmes en nuestra estrategia, mantuvimos estable nuestra política macroeconómica y, en vez de adoptar medidas cortoplacistas fuertemente estimuladoras, innovamos de continuo los lineamientos y formas del macrocontrol, aplicamos un control con objetivos claramente definidos, estimulamos la vitalidad, subsanamos los puntos débiles y fortalecimos la economía real. Controlando los niveles máximo y mínimo de los límites razonables del funcionamiento de la economía y teniendo en el punto de mira las contradicciones destacadas del desarrollo y sus problemas estructurales, implementamos políticas con objetivos definidos y desplegamos nuestras fuerzas con precisión. En un esfuerzo por optimizar la estructura económica sin perder velocidad, adquirimos fuerza motriz mediante el impulso de la reforma, logramos una fuerza auxiliar a través del reajuste estructural y obtuvimos potencial por medio de los beneficios ofrecidos a las condiciones de vida del pueblo, logrando con ello ampliar la demanda del mercado y aumentar la oferta efectiva.
Aplicación eficaz de una política fiscal activa y una política monetaria prudente. Llevamos a cabo reducciones tributarias con un objetivo definido y una rebaja tarifaria general; ensanchamos la esfera de las políticas tributarias preferenciales en favor de las pequeñas empresas y las microempresas; y ampliamos el alcance de la sustitución experimental de la recaudación del impuesto sobre las transacciones por la del impuesto sobre el valor agregado. Aceleramos el ritmo del gasto público y pusimos activamente en circulación los fondos en existencia. Utilizamos flexiblemente los instrumentos de la política monetaria y aumentamos el apoyo a los eslabones débiles del desarrollo económico y social con medidas como la rebaja del coeficiente de caja en determinados tipos de instituciones bancarias, la concesión de représtamos a objetivos definidos y la reducción asimétrica de los tipos de interés; y el ritmo de aumento tanto de los créditos concedidos a las pequeñas empresas y las microempresas como de los ofrecidos a los “tres pilares del agro” [la agricultura, el campo y el campesinado] superaron, respectivamente, en un 4,2 y un 0,7% la media de los demás créditos. Al mismo tiempo, gracias al perfeccionamiento de la supervisión y el control financieros, cumplimos la exigencia mínima de evitar la aparición de riesgos regionales y sistémicos.
2. Profundización de la reforma y la apertura para activar el vigor del desarrollo económico y social. Ante los obstáculos derivados de los regímenes y mecanismos que trababan el desarrollo, valiéndonos de la profundización integral de la reforma y sirviéndonos del consiguiente vigor liberado en el mercado para compensar la presión del crecimiento descendiente de la economía, roímos no pocos huesos duros e impelimos integralmente la reforma de diversos regímenes, incluidos los de la economía, la política, la cultura, la sociedad y la civilización ecológica.
Propulsión sólida de las reformas prioritarias. Se elaboró y puso en práctica el proyecto general de la profundización de la reforma de los regímenes fiscal y tributario; se obtuvieron importantes avances en la reforma del sistema de administración presupuestaria y en la del tributario; los rubros de pagos de transferencia especiales se redujeron en más de un tercio con respecto al año anterior; el porcentaje de los pagos de transferencia ordinarios aumentó; y la administración de la deuda de los gobiernos locales se reforzó. Se ampliaron los márgenes de fluctuación de los tipos de interés de los depósitos y los tipos de cambio; se dieron nuevos pasos en el ensayo de los bancos no gubernamentales; se inició el experimento del programa de conexión bursátil Shanghai-Hong Kong; y se extendió el alcance de la utilización de las reservas de divisas y los fondos de los seguros. Se aceleraron las reformas tarifarias en áreas como la energía, el transporte, la protección medioambiental y las telecomunicaciones. Se emprendió la reforma de los sistemas de administración de los fondos para la ciencia y la tecnología, examen y admisión escolares, empadronamiento, seguro de vejez de los organismos administrativos e instituciones públicas, etc.
Continuidad en considerar tareas importantes de la reforma tanto la simplificación administrativa y la descentralización de los poderes como la combinación de la liberalización con el control. Durante el año pasado, los diversos departamentos del Consejo de Estado suprimieron o transmitieron a niveles inferiores 246 tipos de asuntos sujetos al examen y la aprobación administrativos; eliminaron 29 tipos de actividades de emulación, evaluación y encomio, así como 149 asuntos relativos al reconocimiento y confirmación de la competencia profesional; y volvieron a revisar el catálogo de autorizaciones de proyectos de inversión, reduciendo su esfera en gran medida. Gracias al gran esfuerzo dedicado a la introducción de reformas en el sistema mercantil, los nuevos sujetos del mercado inscritos llegaron a 12,93 millones, produciéndose un aumento del 45,9% en el número de empresas, todo lo cual propició el levantamiento de una nueva oleada de actividades emprendedoras. A pesar de la ralentización del crecimiento económico, las nuevas colocaciones aumentaron en vez de disminuir, lo que puso de manifiesto el poderío gigantesco de la reforma y el potencial ilimitado del mercado.
Promoción de la reforma y el desarrollo mediante la apertura. Se amplió el alcance de la Zona Experimental de Libre Comercio de Shanghai y se crearon zonas experimentales de libre comercio en Guangdong, Tianjin y Fujian. Mantuvimos estables las exportaciones e incrementamos las importaciones y el porcentaje de las primeras en el mercado internacional experimentó una elevación continua. Se utilizaron efectivamente 119.600 millones de dólares de inversiones directas foráneas, cantidad que ocupó el primer puesto mundial. Se invirtieron directamente en el exterior 102.900 millones de dólares, lo que supuso un avance paralelo al del uso de capitales extranjeros. Las zonas de libre comercio entre China e Islandia y entre China y Suiza entraron en funcionamiento y se finalizaron negociaciones sustanciales sobre zonas de libre comercio entre China y la República de Corea, y entre China y Australia. Se cosecharon importantes resultados en la cooperación con el exterior en sectores como las líneas férreas, la electricidad, los hidrocarburos y las telecomunicaciones, con lo que ahora los equipamientos chinos marchan por el mundo a pasos agigantados.
3. Intensificación del reajuste estructural para potenciar la vigorización ulterior del desarrollo. Ante las destacadas contradicciones estructurales, actuamos con dinamismo apoyando unos sectores y controlando otros, y realizamos más tareas imperiosamente necesarias en su momento que beneficiarán aún más el desarrollo a largo plazo, con el propósito de consolidar los cimientos del desarrollo económico y social.
Robustecimiento constante de la base agrícola. Gracias a la intensificación de la política encaminada a fortalecer la base agrícola, facilitar el desarrollo rural y fomentar una vida campesina próspera, logramos que la producción de cereales, leguminosas y tubérculos aumentara por undécimo año consecutivo y que los ingresos del campesinado se incrementaran aceleradamente por quinto año sucesivo. La capacidad productiva integral de la agricultura se elevó a paso seguro; su nivel científico y tecnológico y el de su mecanización mejoraron de modo constante; la marcha de la construcción de obras hidráulicas importantes se aceleró, con lo cual las tierras con sistemas de irrigación ahorradores de agua aumentaron en 33,45 millones de mu; y se construyeron y renovaron 230.000 kilómetros de carreteras rurales. Se inició la puesta en práctica de una nueva ronda de devolución de tierras labrantías a la silvicultura y a la praticultura. Se emprendieron ordenadamente la autenticación, el registro y la concesión de certificados de los derechos sobre tierras rurales, y los nuevos protagonistas de la gestión agrícola crecieron rápidamente.
Enérgica reestructuración sectorial. Intensificamos los esfuerzos por fomentar los nuevos focos de crecimiento; impulsamos el desarrollo acelerado del sector servicios; apoyamos el desarrollo de las industrias emergentes estratégicas, incluyendo la de la Internet móvil, la de circuitos integrados, la de fabricación de equipos de gama alta y la de vehículos de nuevas energías; las finanzas por Internet iniciaron un fuerte y repentino despegue; el comercio electrónico, la logística, los servicios de envío urgente, así como otras nuevas modalidades operativas crecieron con rapidez; numerosos makers descollaron por su talento; y la industria de la creación cultural experimentó un vigoroso desarrollo. Paralelamente a todo ello, se siguió neutralizando el exceso de capacidad productiva y se cumplieron según lo previsto las tareas anuales de eliminación de la capacidad productiva obsoleta en 15 ramas prioritarias, entre ellas la siderúrgica y la cementera. Se reforzó el saneamiento de las nieblas tóxicas y se cumplieron sobradamente las cuotas de eliminación de vehículos con el distintivo amarillo y de automóviles viejos y usados.
Impulso de la construcción de infraestructuras y del desarrollo coordinado de las diversas regiones. Hubo importantes avances en el desarrollo sinérgico de Beijing, Tianjin y Hebei, así como en la construcción de la Franja Económica del Río Changjiang. Las nuevas vías férreas puestas en funcionamiento sumaron 8.427 kilómetros y las líneas ferroviarias de alta velocidad en servicio llegaron a 16.000 kilómetros, cifra esta última que representó más del 60% del total mundial. Se pusieron en operación 112.000 kilómetros de autopistas y se fortaleció todavía más la construcción de vías fluviales, de la aviación civil y de conducciones. Se propulsó con paso seguro la transformación de las redes eléctricas rurales. Los usuarios de banda ancha sobrepasaron los 780 millones. Tras varios años de esfuerzos, el agua empezó a fluir oficialmente por el tramo de la primera fase de la línea central del proyecto de trasvase sur-norte, beneficiando a los millones y millones de integrantes de las masas populares que viven en las áreas adyacentes.
Aplicación de la estrategia del desarrollo propulsado por la innovación. Redoblamos los esfuerzos por dejar expeditos los canales para la transformación de los adelantos científicos y tecnológicos, ampliamos la esfera de aplicación de la política de ensayo de la zona demostrativa nacional de la innovación independiente de Zhongguancun y promovimos la apertura y el codisfrute de los recursos científicos y tecnológicos, todo lo cual contribuyó al despliegue incesante del vigor innovador del personal científico y tecnológico. Logramos nuevos avances rompedores en la supercomputación, la exploración lunar, las aplicaciones de los satélites y otros importantes programas de investigación científica, y los aviones de línea regional desarrollados independientemente por China surcaron el cielo azul.
4. Tejimiento compacto y sólido de una red de garantización de las condiciones de vida del pueblo para incrementar su bienestar. Nos atuvimos con perseverancia al principio de considerar al ser humano como lo primordial e incrementamos de manera sostenida las inversiones en los aspectos relacionados con la vida del pueblo, esforzándonos por lograr la garantización básica, cumplir las exigencias mínimas e implantar los mecanismos correspondientes; aunque el ritmo de aumento de los ingresos públicos tendió a ralentizarse y la presión de los gastos creció, el porcentaje asignado por la hacienda central a las condiciones de vida del pueblo representó más del 70% de todo el gasto público.
Fortalecimiento del empleo y de la seguridad social. Se perfeccionó la política de fomento del empleo; se promulgó el plan de orientación de las actividades emprendedoras; y, sobre la base de la estabilidad, se elevó el índice de colocación de los graduados de los centros docentes superiores. Se implantó un sistema unificado del seguro de vejez básico para las poblaciones urbana y rural, y se produjo otra elevación del 10% en el nivel de la pensión básica de vejez de los jubilados de las empresas. Se inició la construcción de 7,4 millones de apartamentos de protección social y se terminó básicamente la de 5,11 millones. Se estableció por completo el sistema de asistencia temporal; el importe para la garantización del nivel de vida mínimo subió un 9,97% en la ciudad y un 14,1% en el campo; y la cuantía normativa de las pensiones y los subsidios de manutención de los militares minusválidos, los familiares de mártires, los militares licenciados ancianos y los demás beneficiarios del trato preferencial se elevó en más de un 20%.
Promoción continua de la equidad educacional. Se fortaleció el mejoramiento de las condiciones de las escuelas de educación obligatoria deficientes de las zonas pobres; se elevó el nivel de la financiación de los alumnos procedentes de familias con dificultades económicas; y la cuantía normativa de los préstamos estudiantiles estatales ascendió en gran medida. Se amplió hasta el tercer curso el alcance de la política de subvencionar las escuelas profesionales de secundaria por eximir a sus alumnos del pago de la matrícula. Se puso en práctica la política de acceso sin examen a la escuela cercana a donde los alumnos de la etapa de educación obligatoria están empadronados, y en 28 demarcaciones de nivel provincial se aplicó la política de que los jóvenes que acompañan a sus padres trabajadores emigrantes del campo puedan presentarse a los exámenes de ingreso universitario en el lugar de destino. El número de estudiantes rurales de las zonas pobres admitidos en centros docentes superiores prioritarios aumentó más de un 10% por segundo año consecutivo. Gracias a nuestros esfuerzos, el porcentaje del gasto público nacional en educación sobrepasó el 4% del PIB.
Profundización del impulso del desarrollo de la reforma de los servicios médicos, farmacéuticos y sanitarios. El ensayo del seguro de enfermedades graves para las poblaciones urbana y rural se extendió a todas las demarcaciones de nivel provincial; se estableció en lo fundamental el sistema de ayuda de emergencia por enfermedad; y el porcentaje de cobertura del seguro médico para todo el pueblo sobrepasó el 95%. Se profundizó la reforma integral de los centros médico-sanitarios de los niveles de base, y en los niveles de distrito, cantón y aldea se fueron perfeccionando las redes de servicios. El número de distritos y municipios de nivel distrital seleccionados como puntos de ensayo de la reforma de los hospitales públicos superó los 1.300.
Desarrollo dinámico de las actividades y la industria culturales. Se impulsó la construcción de importantes proyectos culturales en beneficio del pueblo y el programa de cobertura de radio y televisión para todas las aldeas fue mejorando hasta llegar a todas las familias. Se puso en práctica la estrategia de promover obras literarias y artísticas selectas, y se perfeccionó el sistema del mercado cultural moderno. Las actividades de masas para el fortalecimiento de la salud se desplegaron impetuosamente y los Juegos Olímpicos de la Juventud celebrados en Nanjing fueron un éxito.
5. Innovación de la gobernanza social para promover la armonía y la estabilidad. Respondimos de manera adecuada a los desastres naturales y los incidentes repentinos, neutralizamos ordenadamente las contradicciones sociales, establecimos y completamos los mecanismos correspondientes, e intensificamos la prevención desde su origen, para garantizar la seguridad de la vida del pueblo y mantener un buen orden público.
El año pasado se produjeron terremotos bastante fuertes en varios lugares de la provincia de Yunnan, entre ellos Ludian y Jinggu. Llevamos a cabo sin tardanza y con gran eficacia la lucha antisísmica y la ayuda a los damnificados, e impulsamos sin contratiempos el restablecimiento y la reconstrucción posdesastres. Ayudamos activamente a África en su lucha contra la epidemia de ébola y previnimos y controlamos eficazmente su penetración en nuestro país. Gracias a la intensificación de la labor relativa a la seguridad en la producción, el total de accidentes, el número de los graves y excepcionalmente graves, así como el de los ocurridos en sectores prioritarios experimentaron una reducción constante. Dedicamos grandes esfuerzos al saneamiento de la contaminación en la mesa, con lo cual la seguridad de los productos alimenticios y farmacéuticos se mantuvo en general estable.
Hicimos un gran esfuerzo por impulsar el manejo de los asuntos administrativos conforme a la ley: el Consejo de Estado presentó al Comité Permanente de la Asamblea Popular Nacional para su revisión y elaboración 15 leyes, entre ellas la Ley de Seguridad de los Productos Alimenticios, y elaboró o revisó 38 decretos administrativos, incluido el Reglamento Provisional sobre la Publicación de Información acerca de Empresas. Se fomentó en profundidad la información pública sobre los asuntos gubernamentales y se sometieron importantes decisiones y políticas gubernamentales a la sociedad para recabar de múltiples formas la opinión de amplios sectores. Se efectuó el tercer censo económico nacional. Se reformó el sistema de atención a las reclamaciones presentadas en persona o por correspondencia. La asistencia jurídica se extendió de los beneficiarios de la garantía del nivel de vida mínimo a la población con rentas bajas. Se fortaleció la construcción comunitaria tanto en la ciudad como en el campo y se puso en práctica la inscripción directa de cuatro tipos de organizaciones sociales, entre ellas las asociaciones gremiales y las cámaras de comercio. Se combatieron sin clemencia todo tipo de actividades delictivas y se potenció el saneamiento coordinado del orden público, salvaguardando así tanto la seguridad estatal como la pública.
Implementamos rigurosamente el espíritu de los ocho reglamentos adoptados por el Comité Central del Partido y rectificamos con perseverancia los cuatro hábitos malsanos: el formalismo, el burocratismo, el hedonismo y la tendencia al derroche y la suntuosidad. Gracias al cumplimiento estricto de las tres normas de autocontrol del Consejo de Estado, se controlaron eficazmente la construcción de edificios de oficinas, salones de actos, hoteles y casas de huéspedes de carácter gubernamental; las plantillas de los organismos administrativos y las instituciones públicas; así como los gastos de los “tres renglones públicos” [los gastos en giras por el extranjero y fuera de la parte continental, en la adquisición y uso de vehículos, y en recepciones oficiales]. Se intensificaron la inspección administrativa y la función supervisora de las auditorías; se promovieron la construcción del estilo del Partido, la moralización administrativa y la lucha anticorrupción; se investigaron y sancionaron rigurosamente los casos de infracción de la disciplina y de la ley; y una serie de corruptos recibieron su merecido.
Redoblamos nuestros esfuerzos por llevar a la práctica importantes políticas y medidas, realizamos concienzudamente supervisiones y revisiones, introdujimos las evaluaciones de terceras partes y las valoraciones de la sociedad, e implantamos un mecanismo eficaz y de efecto duradero, todo lo cual impulsó enérgicamente los diversos trabajos.
A lo largo del pasado año, nuestra diplomacia cosechó abundantes frutos. El presidente Xi Jinping y otros dirigentes estatales visitamos numerosos países, y asistimos a la Cumbre del G-20, al Encuentro de los Dirigentes del BRICS, a la Cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghai, a varias reuniones de dirigentes sobre la cooperación en Asia Oriental, a la Cumbre Asia-Europa, al Foro de Davos y a otros importantes eventos. Celebramos con éxito la XXII Reunión Informal de Dirigentes de los Países y Regiones Miembros de la APEC, la IV Cumbre de la Conferencia sobre Interacción y Medidas para Construir la Confianza en Asia, y el Foro de Boao para Asia. Participamos activamente en el establecimiento de mecanismos multilaterales y en la elaboración de reglas internacionales. En nuestra diplomacia de gran país, logramos progresos sobre la base de la estabilidad, conseguimos abrir nuevas perspectivas a nuestras relaciones diplomáticas con los países circundantes, hicimos nuevos avances en la cooperación con otras naciones en vías de desarrollo y obtuvimos también resultados notorios en la diplomacia económica. Se impulsó la construcción de la Franja Económica de la Ruta de la Seda y la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI [“la Franja y la Ruta”], se emprendieron los preparativos para la creación del Banco Asiático de Inversión en Infraestructuras y se estableció el Fondo de la Ruta de la Seda. Los intercambios y la cooperación entre nuestro país y los demás son cada vez más estrechos, y la imagen de China en la arena internacional como un gran país responsable se perfila con una nitidez cada día mayor.
Estimados diputados: los éxitos cosechados este último año son fruto del manejo de la situación en su conjunto por el Comité Central del Partido, con el camarada Xi Jinping como secretario general, y de su toma científica de decisiones; y son también el resultado de los esfuerzos mancomunados y la lucha incansable de todo el Partido, todo el Ejército y el pueblo de todas las etnias del país. En nombre del Consejo de Estado, quisiera expresar mi sincero agradecimiento al pueblo de todas nuestras etnias, a los partidos democráticos, a las organizaciones populares y a las personalidades de los diferentes sectores sociales; a los compatriotas de las regiones administrativas especiales de Hong Kong y Macao, a los de Taiwan y a los que residen en el exterior; y a los Gobiernos de los diversos países, las organizaciones internacionales y los amigos de las distintas naciones que se interesan por la causa de la modernización de China y le brindan su apoyo.
Hemos de tomar nota no solo de los éxitos, sino también, y con mayor razón, de las dificultades y desafíos en nuestro avance. La inversión carece de fuerza para aumentar; los nuevos focos de consumo escasean; en el mercado internacional no se vislumbra una gran mejora; las dificultades para mantener un crecimiento estable se están agravando; y en algunos terrenos siguen habiendo riesgos subyacentes. Los precios de los productos industriales continúan descendiendo; el coste de los elementos de producción sube; el problema de la difícil y costosa financiación de las pequeñas empresas y las microempresas es destacado; y las empresas tropiezan con más dificultades en su producción y gestión. La modalidad del desarrollo económico es bastante extensiva; la capacidad de innovación se revela insuficiente; el exceso de capacidad productiva es notable; y la base de la agricultura es débil. Las masas aún se muestran descontentas con mucho de lo que respecta a la asistencia médica, la atención a la tercera edad, la vivienda, el transporte, la educación, la distribución de los ingresos, la seguridad de los productos alimenticios, el orden público, etc. En algunos lugares la contaminación ambiental es grave, y de vez en cuando se producen serios accidentes por falta de seguridad. En el trabajo del Gobierno existen todavía insuficiencias, y algunas políticas y medidas no se pusieron en práctica como es debido. Un reducido número de funcionarios de los organismos gubernamentales actuaron arbitrariamente en el desempeño de sus cargos; hubo casos de corrupción alarmantes; y algunas personas, aun siendo funcionarios, se comportaron con negligencia en su puesto y rehusaron hacer lo que su deber les dictaba. Debemos encarar directamente los problemas y no olvidar ni los peligros latentes en tiempos de estabilidad social, ni el desorden en épocas de orden; y tenemos que atrevernos a asumir obligaciones, no pudiendo en absoluto deshonrar nuestra misión histórica ni defraudar al pueblo en el cumplimiento de su encargo.