NUEVA YORK, 3 nov (Xinhua) -- El ex presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), José Maria Marin se presentó este martes ante un tribunal estadounidense y se declaró inocente de las acusaciones de corrupción en un rumoroso escándalo de pago de sobornos que afectó a la FIFA.
Marin quien había sido arrestado hace cinco meses en Suiza, a pedido de las autoridades norteamericanas, fue extraditado este martes y, al contrario del anunciado anteriormente compareció hoy mismo ante el juez federal de Nueva York Raymond Dearie, quien consintió en liberar al jefe del comité organizador del Mundial de Brasil 2014 bajo una fianza de 15 millones de dólares.
Visiblemente cansado, Marin, de 83 años, escuchó la sesión con ayuda de un intérprete y permaneció en una silla mientras sus abogados negociaron las condiciones de la fianza millonaria.
Como tiene una residencia en Nueva York, un apartamento en el lujoso edificio Trump Tower, Marin podrá residir allá, con severas restricciones hasta en final del juicio, cuya próxima sesión está prevista realizarse el 16 de diciembre.
Tras la sesión, Marin dejó el local, sin hablar con la prensa, acompañado por sus abogados y su esposa, a quien no veía desde el 27 de mayo pasado, cuando fue arrestado en Zurich, juntamente con otros seis altos dirigentes de la FIFA, acusados de haber recibido sobornos a cambio de derechos de transmisión de torneos de fútbol.
En el caso del brasileño, las acusaciones se refieren a propinas pagadas por empresas de marketing deportivo por los derechos de transmisiones de las ediciones de la Copa América de 2015, 2016, 2019 y 2023 y de la Copa de Brasil, entre 2013 y 2022.