Desarrollo de energías renovables es oportunidad de cooperación entre AL y China, coinciden académicos

Actualizado a las 15/12/2015 - 15:39

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Por Luis Brito

MEXICO, 14 dic (Xinhua) -- El desarrollo conjunto de tecnología es una opción de cooperación que América Latina y China pueden explorar para impulsar las energías renovables en la región, coincidieron académicos de universidades mexicanas entrevistados por Xinhua.

Juan Carlos Belausteguigoitia, investigador del Centro de Energía y Recursos Naturales del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), expuso que es necesario promover la investigación de tecnología que abarate el uso de fuentes limpias ante la desventaja que tienen frente al menor costo de combustibles fósiles.

El académico ejemplificó que el costo de la energía eólica ha disminuido un 30 por ciento en la última década producto del continuo trabajo de investigación realizado por distintas naciones, entre éstas China, potencia en la producción de tecnología para aprovechar energías limpias.

"La investigación y desarrollo es muy importante, y China es líder en algunas de estas tecnologías. Sería absolutamente deseable que hubiera este intercambio", sostuvo Belausteguigoitia, quien fue economista ambiental líder en América Latina del Banco Mundial.

La generación de energía a partir de fuentes limpias, como la eólica, solar, geotérmica o biomasa, es considerada por Naciones Unidas una medida crítica para enfrentar el cambio climático porque reduce las emisiones de gas de efecto invernadero.

El investigador del ITAM subrayó que las energías renovables también brindan seguridad energética a los países porque se evita la dependencia de terceros productores y mejoran las condiciones del aire.

América Latina es el mayor generador de electricidad por fuente hidroeléctrica, que es considerada limpia, pero debe ampliar la participación de energías como la eólica o solar en su matriz energética de cara a la demanda que se requerirá en 2030, agregó Belausteguigoitia.

"Hay un potencial para hidros grandes, pero el crecimiento probablemente se tendrá que dar en otro tipo de tecnologías", apuntó el investigador del ITAM.

De acuerdo con el último informe Climascopio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), sólo el 11 por ciento de los 352 GW instalados en América Latina en 2014 estaban representados por proyectos de energía renovable, en su mayoría de biomasa, mini-hidroeléctricas, y eólica, y, en menor medida, de geotérmica y solar.

Los proyectos en fuentes limpias en la región representaron el año pasado inversiones por 23.000 millones de dólares, un 50 por ciento más que en 2013, principalmente en Brasil, Chile, México y Uruguay, según el informe del BID.

Antonio del Río, director del Instituto de Energías Renovables de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), sostuvo que el mercado de fuentes limpias en América Latina está prácticamente virgen, por lo que la cooperación científica y comercial que puedan entablar los países de la región con China es una posibilidad real.

El investigador, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias, expuso que las empresas chinas podrían emprender proyectos de colaboración con países de la región para aplicar sistemas que se adapten a las necesidades meteorológicas y ambientales de cada sitio.

"Ahí hay una posibilidad de trabajo conjunto, de desarrollar dispositivos, sistemas, que respondan a las diferentes localidades, y los que conocen las necesidades de las localidades o las limitaciones son los lugareños", manifestó el académico de la UNAM.

Del Río coincidió en que la región tiene que generar una mayor investigación para aprovechar las fuentes renovables, aunque México ha despuntado en el desarrollo de celdas de películas delgadas para energía solar.

"La energía solar no es que sea cara, es que la inversión inicial es alta, pero se paga en entre cinco y ocho años, entonces lo que se necesita es el financiamiento para instalar este tipo de tecnología", dijo el investigador.

El director del Instituto de Energías Renovables de la UNAM enfatizó que las fuentes limpias son distribuidas, por lo que el aumento de su utilización potenciará el desarrollo de las comunidades porque generarán su propia energía.

"Necesitamos pequeños instaladores, pequeñas compañías, que generen el aprovechamiento distribuido de las fuentes renovables", manifestó el académico de la máxima casa de estudios de México.

Belausteguigoitia, del ITAM, consideró que también es importante que se registre una mayor cooperación en los rubros de políticas públicas y comercio entre la región y China, cuyas empresas han invertido en los últimos años en proyectos hidroeléctricos, eólicos y solares en Ecuador, Bolivia, Argentina, Brasil, Chile y México.

"China introduce políticas muy innovadoras sobre control de la contaminación, sobre sistemas de permisos, ahí podríamos aprender también", concluyó el investigador del Centro de Energía y Recursos Naturales del ITAM.