La autoridad de sorteos del estado de Tennessee, Estados Unidos, confirmó hoy que una pareja de la pequeña localidad de Munford reclamó una tercera parte del premio gordo de 1.600 millones de dólares del Powerball, el mayor premio de lotería a nivel mundial.
La directora de la Lotería de Tennessee, Rebecca Hargrove, hizo el anuncio después de que John Robinson apareció con anterioridad en un programa de televisión en Nueva York con su esposa Lisa para afirmar que tenían uno de los boletos ganadores del premio gordo.
Después de la entrevista por televisión, la pareja regresó a Nashville, Tennessee, para reclamar el dinero, con lo que se convirtieron en los primeros de los tres ganadores en hacerlo.
Los otros dos billetes ganadores, vendidos en Melbourne Beach, Florida, y en Chino Hills, California, aún no han sido reclamados. Los ganadores superaron las probabilidades de uno en 292,2 millones para atinarle a todos los números ganadores.
John Robinson dijo que compró el boleto ganador la noche del miércoles en la tienda de la familia en Naifeh cuando se dirigía del trabajo a la casa, como se lo pidió su esposa, aunque no se sentía bien en ese momento.
Robinson dijo que compró cuatro billetes de entrega rápida, uno para cada miembro de la familia, y que se acostó cuando llegó a casa. Su esposa se quedó despierta para ver el sorteo de lotería en la noche y se enteró de que ganó el premio mayor después de revisar cuidadosamente los números varias veces.
Cada uno de los ganadores puede elegir recibir 30 pagos anuales por un total de cerca de 533 millones de dólares, o llevarse en efectivo su tercera parte de alrededor de 327,8 millones de dólares de una sola vez.
Robinson, quien trabaja en tecnologías de la información, dijo que tomará el pago único.
La pareja que tiene un hijo y una hija, decidió aparecer en la televisión antes de reclamar el premio, por consejo de su abogado. Rápidamente reunieron un equipo de abogados y planificadores financieros.
Al hablar de sus futuros planes después de enriquecerse repentinamente, Robinson dijo con anterioridad en el programa "Today" de NBC que su familia ayudará a ciertos amigos, donará dinero al Hospital de Investigación Infantil St. Jude en Memphis y donará a su iglesia.
Su hija Tiffany, una recién graduada de la universidad, quiere saldar sus préstamos estudiantiles y comprar un caballo.
Pero Lisa, quien trabaja en la oficina de un dermatólogo local, aún no está lista para renunciar a su empleo. En una conversación telefónica con su jefe, Lisa dijo que se presentaría a trabajar el lunes.