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Diario del Pueblo: la cuestión nuclear de la República Popular Democrática de Corea debe regresar a la mesa de negociaciones

Actualizado a las 11/03/2016 - 16:00
Palabras clave:RPDC,nuclear

Beijing,11/03/2016(El Pueblo en Línea)-11 de marzo, Diario del Pueblo publicó uno de sus artículos Zhongsheng titulado “La cuestión nuclear de la República Popular Democrática de Corea (RPDC) debe regresar a la mesa de negociaciones”. El artículo profundiza en la explicación de Wang Yi, ministro de Relaciones Exteriores chino, en una rueda de prensa el 8 de marzo sobre cuestión nuclear de la península coreana, que revela el apoyo de China a las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, advertiendo a la RPDC que no excuse las acciones peligrosas del problema militar con su actitud de esperar, observar y especular, destacando la reanudación de las conversaciones a seis bandos y la importancia de lograr la desnuclearización de la península coreana a través de medios pacíficos.

El artículo dice lo siguiente:

En la actualidad, la situación en la península coreana es muy sensible y compleja, y ambos lados estimulan de manera mutua el ambiente preocupante. Como vecino más grande de la península coreana, China no se quedará de brazos cruzados viendo cómo se deteriora la estabilidad en la península y se hace un daño injustificado a los intereses de la seguridad de China.

2 de marzo, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas aprobó por unanimidad la resolución Nº 2270 por el que se acordaron una serie de sanciones en contra la República Popular Democrática de Corea y reafirma su apoyo a la reanudación de las conversaciones a seis bandos para llevar a acabo la desnuclearización de la península coreana por medios pacíficos. China tiene sus propios intereses y posición en la península coreana, y "no permitirá ni la guerra ni la nuclearización de la península coreana". China promoverá el fin de los planes de nuclearización de la República Popular Democrática de Corea y apoyará e implementará seriamente las resoluciones del Consejo de Seguridad.

De hecho, la resolución no sólo incluye sanciones, sino que además reitera el apoyo a las conversaciones a seis bandos, y pide que no se tomen acciones que puedan aumentar aún más la tensión en la región. La comunidad internacional debe reconocer que si la tensión queda fuera de control, las consecuencias podrían ser desastrosas para todos.

En la actualidad, todas las partes deben mostrar una determinación precisa sobre la situación, mantener la calma y moderación. No debe ser sólo una situación temporal, sin importar las consecuencias. Como la parte china ha destacado, las sanciones son medios necesarios, la estabilidad es una prioridad y las negociaciones son el camino fundamental a seguir. La resolución del Consejo de Seguridad pretende esencialmente detener la nuclearización de la República Popular Democrática de Corea bloqueando sus canales de financiación, para que regrese a la mesa de negociaciones, y poder promover y hacer realidad la desnuclearización de la península coreana, mantener el sistema internacional de no proliferación nuclear.

La cuestión nuclear en la península coreana es un problema que se ha prolongado durante mucho tiempo, y la actitud de esperar, observar y especular es muy arriesgada. El contrabando de armas, las provocaciones mutuas, los enfrentamientos militares, las operaciones militares en la zona o el despliegue de armamento más allá de los intereses de defensa necesarios intensificarán la gravedad de la situación en la península coreana y dificultarán la solución del problema.

 

Lecciones aprendidas indican que para solucionar cualquier problema en el mundo es necesario poner orden en la región. Resolver parcialmente la cuestión a través de la "fuerza" es la opción más difícil para conseguir un avance real. Para hacer realidad la desnuclearización de la península coreana, el camino fundamental para resolver el problema pasa por “regresar a la mesa de negociaciones”.

Como país anfitrión en las conversaciones a seis bandos, China siempre ha tenido una posición justa y objetiva, y siempre ha discutido la solución de problemas con las partes involucradas. China propone y promueve las negociaciones para la desnuclearización de la península coreana, además de ser el hilo conductor en la transformación del mecanismo de armisticio a un mecanismo de paz: la desnuclearización es un objetivo firme de la comunidad internacional; el macanismo de paz es la opción razonable para la República Popular Democrática de Corea.

Ambos bandos deben lograr entablar el diálogo, avanzar poco a poco y alcanzar una solución integral diseñada para equilibrar las principales preocupaciones de todas las partes y aclarar los objetivos que se deben lograr a través del diálogo y las negociaciones. A través del diálogo y las negociaciones debemos encontrar el punto de fricción para reanudar las conversaciones tan pronto como sea posible. Entre las ideas presentadas por otros partes están la de una negociación a tres, cuatro y hasta cinco bandos, opciones flexibles para devolver la cuestión nuclear de la península coreana a la mesa de negociaciones, donde China mantiene una actitud abierta.

Para solucionar el problema se necesita una estrategia integral, y así sanar la raíz de la cuestión. Todos los Estados y regiones responsables deben partir desde la base de los intereses comunes y a largo plazo, mostrar paciencia y determinación, demostrar razón y valor, entablar un diálogo activo, mostrar mutuamente la buena voluntad, avanzar desafiando las dificultades y llevar a cabo una acción conjunta.

Con la desnuclearización se consigue la paz, con el diálogo se consigue la salida, con la cooperación se consigue el beneficio mutuo. En la cuestión de la península coreana, este es precisamente el máximo común divisor de las partes, el interés común, la piedra angular sobre la que gira la convivencia y las oportunidades compartidas. 

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