La inversión china en Europa y Estados Unidos batió su récord en 2015, según un informe publicado hoy jueves por el despacho de abogados Baker & McKenzie.
Los inversores chinos inyectaron el año pasado 23.000 millones de dólares en Europa y 15.000 millones de dólares en Estados Unidos, según el informe.
Italia, Francia y Reino Unido fueron los tres mayores destinos de las inversiones chinas en Europa, mientras que en Estados Unidos lo fueron los estados de Nueva York, California y Texas, recoge el estudio.
La inversión china se concentró en los sectores inmobiliario, automovilístico, financiero y de la tecnología informática, indica.
El informa señala asimismo que las empresas chinas han accedido a la manufactura de alta tecnología y alta gama a través de la compra de compañías reputadas. Su objetivo es conseguir retornos a largo plazo mediante la inversión en la construcción de viviendas y las infraestructuras, para protegerse ante los riesgos de la ralentización económica de China.