Grecia queda paralizada por huelga general contra planes de reforma

Actualizado a las 07/05/2016 - 10:28

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Grecia es afectada por una huelga general nacional de 48 horas que fue iniciada hoy por sindicatos en protesta por las iniciativas de ley de reforma fiscal y de pensiones que el gobierno promueve a cambio de más ayuda de los prestamistas internacionales.

La huelga general afectó al transporte público y a otros servicios. Los barcos se mantendrán en los muelles hasta el martes, pues la federación de marineros ha optado por una huelga de cuatro días.

Los servicios de metro, tren y autobuses también fueron interrumpidos, y las escuelas, bancos, oficinas fiscales y tribunales se mantienen cerradas y los hospitales operan con servicios de emergencia.

Los sindicatos de periodistas también se han unido a la huelga, mientras que delegaciones de agricultores se dirigen a Atenas para unirse a los mítines.

La huelga fue declarada para el viernes y el sábado por parte de los sindicatos aglutinantes de empleados de los sectores público y privado, ADEDY y GSEE, y otros sindicatos que rechazan los planes del gobierno para revisar las pensiones e incrementar los impuestos, como lo exigen los acreedores internacionales.

El voto en el Parlamento sobre las reformas estaba programado originalmente para alrededor del 10 de mayo, pero el gobierno decidió el jueves acelerar los procedimientos para hacerlo la noche del domingo.

Atenas tiene el objetivo de concluir la revisión en mayo para recibir el próximo paquete de rescate y negociar el alivio de deuda.

Funcionarios del gobierno argumentaron que las reformas en seguridad social y fiscales garantizan plenamente las pensiones, protegen a los débiles, distribuyen las cargas de contribuciones fiscales y de seguridad social de una manera más justa y proporcional y garantizan la sostenibilidad del sistema de seguridad social.

Los partidos de oposición y los sindicatos acusan al gobierno de acelerar los procedimientos de manera abrupta. También insisten en que la nueva ronda de alzas de impuestos y recortes en las pensiones por alrededor de 5.600 millones de euros (6.400 millones de dólares) dará un golpe final al sistema de bienestar y a los hogares y empresas griegas promedio luego de seis años de recesión acentuada y de varias rondas de medidas de austeridad.

Los sindicalistas urgieron a los miembros del Parlamento a votar en contra de las reformas.

Grecia y sus acreedores internacionales han negociado durante meses para ponerse de acuerdo sobre las reformas que permitirían al país agobiado por las deudas continuar recibiendo ayuda de rescate.

El Eurogrupo sostendrá una reunión especial la tarde del lunes para revisar el progreso de las negociaciones.

La coalición de izquierda-derecha del primer ministro Alexis Tsipras tiene una estrecha mayoría de 153 legisladores en el Parlamento de 300 miembros. Aprobar el paquete de reforma en el Parlamento no será una tarea fácil para la coalición.