Miles de personas protestan en Sao Paulo contra el gobierno brasileño y piden anticipar las elecciones

Actualizado a las 12/09/2016 - 15:30

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Miles de personas salieron hoy a las calles de Sao Paulo, la mayor ciudad de Brasil, para protestar contra el presidente del país, Michel Temer, y pedir la anticipación de las elecciones presidenciales de 2018.

Más de 60.000 personas, según los organizadores (el Frente Pueblo Sin Miedo y el Frente Brasil Popular), y 8.000 según la Policía Militarizada, se concentraron este domingo en la céntrica Avenida Paulista, el corazón financiero de Brasil, donde ocuparon todas las pistas de la vía a lo largo de dos cuadras, en la mayor protesta hasta ahora contra el gobierno y Temer.

Los participantes gritaron todo el tiempo "Fuera Temer" y mostraron pancartas y carteles en contra del nuevo gobierno y el mandatario, al cargo desde el 1 de septiembre, cuando el Senado destituyó a la presidenta Dilma Rousseff.

La manifestación contó con la presencia de varios políticos, entre ellos dos de los actuales candidatos a la alcaldía de la mayor ciudad brasileña en las elecciones de octubre próximo, el actual alcalde de Sao Paulo y líder del PT, Fernando Haddad, y la diputada y exalcaldesa Luiza Erundina, aspirante por el izquierdista Partido Socialismo y Libertad (PSOL).

"Todas estas protestas están dirigidas a combatir el golpe y a aumentar la presión en las calles. Desde que el golpe fue consumado, todo el PT enarbola la bandera por nuevas elecciones", afirmó en su discurso el presidente del PT, Rui Falcao, quien llegó a la Avenida Paulista acompañado por los senadores Lindbergh Farias y Vanessa Grazziotin.

A diferencia de las manifestaciones de la semana pasada contra Temer en la Avenida Paulista, que terminaron con actos vandálicos y violentos choques con la Policía, la manifestación de este domingo transcurrió sin incidentes graves.

Las manifestaciones comenzaron en varias ciudades después de que el Senado, con 61 votos a favor y 20 en contra, destituyera a Rousseff y la sustituyera definitivamente por Temer. La ahora expresidenta fue acusada de haber cometido irregularidades fiscales en los informes de rendición de cuentas públicas en su gestión de 2014 y 2015.