La presidenta chilena, Michelle Bachelet, admitió hoy, domingo, la ajustada derrota de la coalición de centroizquirda en los comicios municipales, atribuyéndola a la falta de unidad.
"La (coalición) Nueva Mayoría ha bajado su nivel de apoyo, debemos escuchar ese llamado de atención. A veces hemos mostrados más desunión que unión", dijo Bachelet al comparecer ante la prensa con cerca del 80 por ciento de los resultados de los sufragios escrutados.
En las elecciones de hoy, los chilenos elegían a los jefes comunales en las 346 comunas en las que está dividido administrativamente el país.
La coalición gubernamental se quedaría con 143 alcaldes y la derecha con 142 de acuerdo con los resultados, aunque en porcentaje de votos la oposición se impone: 39 por ciento frente a 38 por ciento.
En las derrotas más dolorosas para el oficialismo, en la capital, Felipe Alesandri, del derechista Renovación Nacional, derrotó a la oficialista Carolina Tohá, mientras en Providencia la exministra del expresidente Sebastián Piñera Evelyn Mathei venció a Josefa Errázuriz.
"No vamos a renunciar a nuestra tarea y redoblaremos nuestros esfuerzos, pero tenemos que hacer mejor las cosas", dijo Bachelet.
La abstención obtuvo un registro histórico con una participación de apenas el 34 por ciento del electorado habilitado para votar. Es la más baja desde el retorno a la democracia en 1990.
La jefa de Estado la atribuyó a la creciente desafección de los ciudadanos con las grandes coaliciones, salpicadas por investigaciones de corrupción.
"En Chile hemos sido sacudidos por las malas prácticas y por la incapacidad de las instituciones", dijo Bachelet.
"La abstención es un (síntoma del) malestar que crece en nuestro país", añadió la mandataria.
En ese sentido indicó que "la fortaleza de nuestra democracia está afectada. Los que tenemos puestos de liderazgo tenemos que preguntarnos si estamos ofreciendo respuestas. Los ciudadanos, por su parte, tiene que reconocer que la participación es el camino".
El descontento se sintió también entre los que acudieron a votar y una de las sorpresas fue el triunfo del izquierdista Jorge Sharp en la ciudad de Valparaíso, una de las mayores del país, que superó en más del doble los votos sumados de la centroizquierda y la derecha.
En otro indicador de la jornada, los medios resaltaban que ahora la derecha gobernará a 6,3 millones de personas y el oficialismo a 5,5 millones, en tanto los grupos independientes abarcarán comunas que suman unos 2 millones de personas, cifras que pueden tener importancia de cara a las elecciones presidenciales de 2017.