El gobierno de Canadá deportó a Ruanda a Henri Jean-Claude Seyoboka, sospechoso del genocidio de 1994 en el que murieron cerca de un millón de ruandeses.
Seyoboka, quien había vivido en Canadá desde 1996, llegó al Aeropuerto Internacional de Kigali esta mañana proveniente de Canadá. La deportación puso fin a su evasión de 20 años de la justicia.
El hombre de 50 años de edad es el segundo sospechoso de genocidio deportado por Canadá, luego de Leon Mugesera en 2012.
Seyoboka está acusado de genocidio, crímenes contra la humanidad, asesinato y exterminio, que ocurrieron en Nyarugenge, en la capital Kigali. Es sospechoso de haber participado en reuniones de planificación del genocidio de 1994, indicó la Autoridad de la Fiscalía Pública Nacional de Ruanda (AFPN).
La AFPN señaló que en 2007, los tribunales Gacaca enjuiciaron el caso de Seyoboka y lo sentenciaron a 19 años de cárcel por crímenes de genocidio.
Los tribunales Gacaca son tribunales locales que enjuiciaron más de dos millones de casos relacionados con los crímenes cometidos durante le genocidio de 1994 en Ruanda.
Durante el genocidio de 1994, Seyoboka era el segundo teniente del ejército genocida (Ex-FAR). Ese mismo año huyó del país.
La semana pasada, el gobierno holandés deportó a Ruanda a dos presuntos genocidas, Jean-Claude Iyamuremye y Jean-Baptiste Mugimba.
Hasta ahora, 12 personas acusadas de cometer genocidio han sido extraditadas de Uganda, la República Democrática del Congo, Canadá, Estados Unidos, Holanda y el Tribunal Criminal Internacional de Naciones Unidas para Ruanda, para ser juzgados en Ruanda.