Los cancilleres de Brasil, José Serra, y de Argentina, Susana Malcorra, acordaron hoy en Brasilia homogeneizar normas sanitarias y metrológicas para facilitar el comercio y mejorar la capacidad de negociar acuerdos con terceros.
En rueda de prensa en el Palacio de Itamaraty, los cancilleres coincidieron en la fuerte interdependencia de ambas economías y la voluntad para una mayor "proyección al mundo" en el plano comercial.
Serra y Malcorra abordaron temas vinculados a la estrategia del Mercado Común del Sur (Mercosur), la integración de las cadenas de valor, la seguridad en las fronteras y el impulso a una mayor utilización de la hidrovía Paraguay-Paraná para transporte de mercaderías y turismo.
La reunión fue preparatoria de una visita oficial a Brasilia del presidente de Argentina, Mauricio Macri, en febrero próximo.
Además, Argentina asumirá este mes la presidencia pro témpore del Mercosur, que en julio próximo pasará a manos de Brasil.
Serra dijo que la relación entre los dos países es de una "interdependencia saludable" y que las conversaciones estuvieron sobre todo centradas en buscar dinamizar el comercio intrabloque y sobre todo ampliar la proyección internacional, con nuevos acuerdos.
Destacó también que estuvieron reunidos con el presidente de Brasil, Michel Temer, por más de una hora, para repasar los temas más importantes de la relación bilateral.
Malcorra destacó que se cumplen 30 años desde de la fundación del Mercosur, que convirtió a los dos mayores países de Suramérica en socios cada vez más integrados.
"Sólo un Brasil fuerte será una buena noticia para Argentina e igualmente una Argentina fuerte es una buena noticia para Brasil", señaló.
Según la canciller, las negociaciones entre el Mercosur y la Unión Europea (UE) para un acuerdo de libre comercio "son una oportunidad".
Malcorra citó en particular las declaraciones del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de dejar a un lado la posibilidad de un Acuerdo Transatlántico con los países europeos.
"Queremos aprovechar esa oportunidad para mover la agenda del Mercosur lo más rápido posible, pero también creemos que hay otras oportunidades para avanzar en acuerdos con mayor celeridad", afirmó.
Serra recordó que Brasil y Argentina están negociando separadamente con la UE, por lo que la intención es formar un grupo de trabajo para llegar a un entendimiento común y tener mejor capacidad negociadora.
"Hay un margen de interés común muy grande. Lo que tenemos que hacer en el Mercosur es homogeneizar los requisitos de naturaleza técnica, sanitaria y fitosanitaria. Vamos a crear un órgano entre Argentina y Brasil para coordinación de las agencias. Es un elemento de facilitación del comercio entre nosotros y hacia terceros", explicó.
Los cancilleres acordaron también ampliar la utilización de la hidrovía Paraguay-Paraná, la cual une a Brasil, Argentina, Paraguay, Uruguay y llega hasta Bolivia, con la previsión de pasar de 17 millones de toneladas anuales a 50 millones de toneladas en esta década.
De igual forma resaltaron el potencial de negocios en el aprovechamiento de la hidrovía, que demandará fuertes inversiones en los próximos años.