El Fondo Monetario Internacional (FMI) recortó la estimación de crecimiento para Chile en 2017 desde un 2,1 por ciento a un 1,7 por ciento.
El organismo también rebajó la proyección de expansión para 2018 desde un 2,7 por ciento a un 2,3 por ciento.
En su informe Panorama Económico Mundial, la entidad señaló que en general se prevé una recuperación más débil de lo esperado para América Latina en su conjunto, con un crecimiento de 1,1 por ciento en 2017 y 2 por ciento en 2018, versus el 1,2 y 2,1 por ciento pronosticados en enero.
"Dentro de la región, las perspectivas de crecimiento varían sustancialmente, según el país. Si bien la actividad de la mayor parte de los exportadores de materias primas estaría respaldada por la recuperación de los precios de las materias primas, los fundamentos internos continuarían desempeñando un papel determinante en las perspectivas de algunos países grandes", dijo el FMI en su informe.
"El aumento de los precios de las materias primas contribuirá a estimular el crecimiento en 2017 en Chile (1,7 por ciento) y Colombia (2,3 por ciento)", añadió.
Se prevé en la región que Brasil dejará atrás la recesiones, gracias a un crecimiento previsto de 0,2 por ciento en 2017 y 1,7 por ciento en 2018.
Entre los factores que contribuirán a esta recuperación paulatina, cabe mencionar una menor incertidumbre política, la distensión de la política monetaria y el avance del programa de reforma, dijo el FMI.
En el caso de Argentina, tras contraerse el año pasado, la actividad tiene visos de expandirse con un aumento estimado de 2,2 por ciento para 2017 gracias al aumento del consumo y la inversión pública, y un incremento de 2,3 por ciento en 2018 a medida que vayan recuperándose la inversión privada y las exportaciones.