El presidente de Bolivia, Evo Morales, reivindicó hoy durante la Asamblea General de Naciones Unidas (ONU) la defensa de la Tierra para salvar a la humanidad, el respeto a los derechos de los indígenas, evitar invasiones y preservar la paz mundial.
"Nuestra responsabilidad es organizar la lucha mundial para salvar la vida y (al) planeta Tierra; 'planeta o muerte' es nuestro lema que debemos asumir las naciones", dijo Morales en su discurso en la sede del organismo mundial en la ciudad de Nueva York.
La ONU conmemora este martes el décimo aniversario de la Declaración sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas en 2007, en que el presidente indígena boliviano es protagonista y símbolo de los avances logrados por estas comunidades.
La institución abrió la víspera por tal motivo la XVI sesión del Foro Indígena, evento que se realizará hasta el 5 de mayo próximo, mismo que contará con la participación de alrededor de 1.000 representantes de comunidades de todo el mundo.
Morales, perteneciente a la etnia aimara y primer presidente indígena en el país sudamericano, llamó en su discurso a los indígenas del mundo a combatir el capitalismo, el colonialismo y el imperialismo, así como a trabajar por un nuevo orden mundial.
El mandatario de Bolivia fue el encargado de pronunciar el discurso central en la celebración por la Declaración sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas, mensaje que fue transmitido a Bolivia por el canal estatal.
Según Morales, el país sudamericano ha tenido varios logros desde que inició el llamado Estado Plurinacional en 2006, año en que comenzó su primer mandato presidencial, que puso como ejemplo de lo que se puede realizar a nivel global.
"Quiero decirles hermanos y hermanas, con mucha humildad, que lo logrado en países como el mío es un ejemplo en lo que podemos ejercer o hacer a escala global", afirmó.
Aprovechó la palestra internacional para plantear ante los miembros de la ONU un decálogo que busca un mundo mejor, cuyo primer punto establece la defensa de los derechos de la Madre Tierra, en que el único camino es la lucha contra el capitalismo y la sobre explotación.
El segundo tema se refiere a defender los derechos de los pueblos a la paz y la soberanía, así como privilegiar la complementariedad y la construcción de un mundo multipolar.
Otro punto rechaza la invasión o el uso de la fuerza, que cese todo tipo de guerra y que los problemas sean resueltos mediante mecanismos pacíficos para acabar con la carrera armamentista.
El cuarto planteamiento es el reconocimiento de la ciudadanía universal, acabar con los muros y las fronteras, así como con la marginación y la discriminación.
El siguiente aspecto que deben asumir los pueblos es la construcción de un mundo en el que se erradique el neocolonialismo cultural y tecnológico; luchar para que los servicios básicos sean reconocidos como un derecho humano.
El séptimo punto del decálogo propuesto por el mandatario boliviano se refiere a trabajar en el respeto de la multilateralidad y la igualdad soberana.
La solidaridad y complementariedad como base de las relaciones comerciales es otro de los aspectos, que tiene que ver con un nuevo orden económico mundial.
El noveno punto de la propuesta es la construcción de un mundo en el que prime la unidad de los pueblos, de la gente del campo y la ciudad.
El último elemento del decálogo se refiere a la democracia global y participativa: "Que quienes gobiernan, lo hagan escuchando a sus pueblos con la ausencia de monarquías y anarquías financieras".
"Quien apoya al capitalismo, apoya a la guerra, y quien apoya a la guerra, apoya la cultura de la muerte", enfatizó Morales en su discurso ante la Asamblea General de la ONU.
El mandatario boliviano aprovechó la oportunidad para referirse a otros temas como la guerra en Siria y la paz en Colombia, además de pronunciarse por acabar con el bloqueo económico a Cuba y rechazar lo que llamó "golpe de Estado" en Venezuela.
Según Morales, estos temas deben ser abordados de manera conjunta para construir un mundo con democracia real, sin oligarquías ni anarquías financieras, sino con la política al servicio de la vida.