Fiscal venezolana debe irse tras instalación de Constituyente, dice vicepresidente

Actualizado a las 14/07/2017 - 08:47

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CARACAS, 13 jul (Xinhua) -- El vicepresidente de Venezuela, Tareck El Aissami, dijo este jueves que la fiscal general, Luisa Ortega, "tiene que irse" tras la instalación de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) que se elegirá el 30 de julio.

Durante un acto político con seguidores del chavismo en el estado de Aragua (centro-norte), El Aissami declaró que "esa fiscal, una vez instalada la Asamblea Constituyente, tiene que irse".

"La Constituyente no es para que ella (Ortega Díaz) se vaya solamente, es para voltear al Ministerio Público (MP, Fiscalía)", dijo el vicepresidente venezolano, al tiempo que rechazó las manifestaciones contra el gobierno.

En ese sentido, afirmó que el MP, dependencia del Poder Ciudadano, señalada por el Ejecutivo de supuestamente aupar la violencia en el país, debe "tener fiscales valientes (...) que enfrenten a este grupo de terroristas".

"Y no se atreva nadie a convocar más nunca a la violencia de calle (...), quien lo haga debe ir detenido inmediatamente, llámese como se llame y tenga el cargo que tenga", agregó.

El Aissami, quien calificó de "indigna" a Luisa Ortega, comentó que a la titular del MP "le queda grande mencionar al comandante (Hugo) Chávez (1999-2013) en su boca".

"Le exigimos que más nunca lo diga -el nombre de Chávez- (...) Usted es una traidora, vende patria", añadió El Aissami.

Luisa Ortega, confesa chavista, está en medio de una polémica desde abril pasado, tras rebelarse contra el gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, a quien acusa de haber "roto el hilo constitucional" del país caribeño.

La fiscal general venezolana, quien se convirtió en una de las voces más críticas de Maduro, solicitó "echar atrás" el proceso Constituyente convocado en mayo, al considerar que inició de manera "fraudulenta".

Ortega sostiene que la actual Constitución, impulsada por el fallecido presidente Hugo Chávez en 1999, "es inmejorable".

La discrepancia entre los poderes públicos de Venezuela se intensificó en los últimos meses, en medio de manifestaciones que comenzaron en abril pasado y que han dejado al menos 94 muertos, según cifras del MP.