GINEBRA, 6 sep (Xinhua) -- Aunque la violencia se ha reducido en las zonas de distensión en Siria, las partes en conflicto siguen cometiendo crímenes inimaginables contra los civiles, se indicó en un informe de la ONU emitido hoy.
En su informe más reciente, la Comisión de Investigación de la ONU sobre Siria indicó que los crímenes incluyen desplazamiento forzado, ataques deliberados contra civiles y el uso de armas químicas.
En un análisis de las principales tendencias y patrones de las violaciones a los derechos humanos y al derecho internacional cometidas en Siria, el más reciente informe señala que entre marzo y julio de 2017, las partes en conflicto siguieron imponiendo bloqueos y manipulando la ayuda humanitaria para forzar la rendición.
De acuerdo con el informe, el grupo terrorista Hayat Tahrir al-Sham y el Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL) siguieron empleando tácticas brutales en contra de los civiles.
Los terroristas y otros grupos armados atacaron a minorías religiosas con atentados con coches-bomba y ataques suicidas, usando francotiradores y tomando rehenes, incluso en áreas controladas por el gobierno sirio, se indicó en el informe.
En Al-Rashidin, Alepo, agregó el informe, un solo coche-bomba mató a 96 personas, incluyendo a 68 niños desplazados internos provenientes del las previamente sitiadas Fuah y Kafraya en Idlib. Después, al menos 17 civiles fueron tomados como rehenes por grupos armados y otros siguen desparecidos.
El informe indica que las fuerzas gubernamentales sirias siguieron atacado de forma deliberada a civiles, incluso con armas químicas en áreas controladas por la oposición.
El informe señala además que las fuerzas estadounidenses no tomaron todas las precauciones posibles para proteger a los civiles y los objetivos civiles al atacar a presuntos terroristas y destruir parte del complejo de una mezquita en Al-Jinah en Alepo en el mes de marzo, lo que violó el derecho humanitario internacional.
Al destacar las violaciones cometidas durante el periodo reportado, el informe destaca la urgente necesidad de emprender acciones auténticas, conjuntas y sostenidas por parte de los actores nacionales e internacionales para encontrar una solución política y poner fin a las graves violaciones a los derechos humanos y a las leyes de la guerra.
La Comisión Internacional Independiente de Investigación sobre la República Árabe Siria tiene el mandato del Consejo de Derechos Humanos de la ONU de investigar y registrar todas las violaciones al derecho internacional cometidas desde marzo de 2011 en Siria.