SANTIAGO, 7 nov (Xinhua) -- Los gobiernos latinoamericanos deben desarrollar políticas de géneros para potenciar el papel de la mujer en la agricultura familiar de la región, según un informe de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) publicado hoy.
"Durante décadas, los gobiernos de la región diseñaron sus programas y proyectos basados en una lógica que considera a la sociedad como un conjunto homogéneo, sin sexo ni raza. Hoy sabemos que se requiere una mirada distinta que reconozca las diferencias e inequidades que enfrentan las mujeres y sepa darles la asistencia y capacitación que necesitan", afirmó la oficial de género de la FAO, Claudia Brito.
El ente supranacional remarcó que juegan los mujeres en la agricultura familiar de América Latina y el Caribe se ha vuelto "cada vez más importantes", pero destacó que desencadenar todo su potencial requiere transformar los sistemas de asistencia técnica y extensión rural bajo el enfoque de género.
La FAO analizó los sistemas de asistencia técnica y extensión rural en Guatemala, Jamaica, Paraguay Perú y Brasil para mejorar el impacto sobre las mujeres rurales de una región que hace de la agricultura uno de sus principales motores económicos.
"Bien diseñados, estos sistemas pueden contribuir a superar las desigualdades de género. Mal diseñados, pueden replicar e incluso ahondar las desigualdades entre hombres y mujeres", insistió Brito.
Una de las principales críticas de la FAO es que los servicios públicos de asistencia técnica y extensión rural en Latinoamérica aún no consideran a las mujeres como participantes activas del proceso productivo en la agricultura familiar.
El texto incide en que estos sistemas pueden convertirse en medios efectivos "para promover el acceso de las mujeres a los recursos, servicios financieros y productivos, tecnología y conocimiento para mejorar sus oportunidades económicas".
"Sin embargo, para que esto suceda se deben cambiar los sistemas actuales, incorporando el enfoque de género y una mirada multidimensional de reducción de la pobreza", reza el comunicado.
La FAO alerta de otras deficiencias de género: la proporción de mujeres es inferior a la de los hombres y los recursos focalizados en cada usuaria son inferiores a los invertidos en cada usuario hombre.
Según la FAO, es desigualdades de género son una de las causas estructurales de la desigualdad social de Latinoamérica: sólo el 16 % de las explotaciones agrícolas de América Latina y el Caribe están encabezadas por mujeres.
"Tanto las mujeres que encabezan explotaciones agrícolas como las trabajadoras requieren políticas y programas de asistencia técnica y extensión rural específicamente diseñados para ellas", concluyó Brito.