BRASILIA, 9 nov (Xinhua) -- El ministro de Hacienda de Brasil, Henrique Meirelles, afirmó hoy que fue firmado un compromiso con los líderes de partidos que integran la coalición de gobierno, para que la reforma de la Seguridad Social sea votada "lo antes posible".
Meirelles participó la mañana de este jueves en un desayuno en la residencia oficial de la Presidencia de la Cámara de Diputados, junto al presidente brasileño, Michel Temer, y líderes de la base oficialista, además de ministros del área política.
El funcionario afirmó que sintió un nivel mayor de compromiso para avanzar en la tramitación de la propuesta.
"La cuestión es que se concluyó el entendimiento de que es necesario votar la reforma de la Seguridad Social y encaminarla lo más rápido posible", dijo Meirelles.
Agregó que hizo "una explicación bastante enfática y clara mostrando la necesidad de la reforma, que no es una cuestión de opinión, es una necesidad".
Según Meirelles, la reforma elimina privilegios, tomando en cuenta que los más pobres tienden a jubilarse actualmente a los 65 años, mientras que quienes se jubilan más temprano son exactamente las personas de mayores ingresos.
El representante de Hacienda confirmó que habrá cambios en la propuesta que fue aprobada en comisión especial en la Cámara de Diputados, pero no detalló cuáles serían las modificaciones.
Sólo adelantó que la edad mínima, el período transitorio y las normas que tratan de la eliminación de los casos de doble jubilación, no deben salir de la propuesta original.
Enfatizó, sin embargo, que independientemente de cualquier cambio que se haga en el texto, el beneficio fiscal tiene que, de hecho, contribuir al equilibrio de las cuentas públicas para los próximos años.
Adelantó que su equipo hará cuentas para dimensionar el efecto fiscal de las modificaciones que se han sugerido en la reforma.
La mejora en los índices de inflación y otros signos positivos de la economía, fueron posibles debido a las reformas que ya se han hecho, como la definición del techo para los gastos públicos, destacó Meirelles.
Reafirmó que los cambios en la Seguridad Social son importantes para atraer inversiones a largo plazo y consolidar el proceso de recuperación económica.
Entre los puntos principales de la reforma previsional propuesta por el gobierno, están la edad mínima de jubilación de 65 años para los hombres y 62 para las mujeres, además de la exigencia de al menos 25 años de cotización.
El proyecto ofrece una regla de transición para los trabajadores que ya están en el mercado laboral.
En mayo pasado, tras una sesión legislativa de más de nueve horas, el gobierno logró aprobar el texto en la comisión especial de la reforma instalada en la Cámara de Diputados para discutir el tema, pero la crisis política subsecuente impidió continuar con el debate.
Por tratarse de una enmienda constitucional, la reforma previsional precisa ser aprobada por un mínimo de 308 sobre 513 diputados en dos votaciones.