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Volcán Turrialba arroja cenizas sobre varias ciudades de Costa Rica

SAN JOSE, 10 feb (Xinhua) -- El volcán Turrialba arrojó cenizas esta tarde sobre varias ciudades del Valle Central de Costa Rica, informó esta tarde el Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (Ovsicori).

Según detalló la entidad, el volcán "sigue emitiendo ceniza de manera pasiva y continua desde el fin de semana pasado", como parte de un proceso que provocó la caída de los materiales volcánicos en algunas de las ciudades más pobladas del país centroamericano.

Entre ellas, el Ovsicori documentó reportes en los cantones de Moravia, Goicoechea, Curridabat, Coronado, Montes de Oca, Pavas, Belén y algunas zonas de Alajuela; situados a no más de 50 kilómetros, hacia el oeste del macizo.

El volcán Turrialba se ubica 37 kilómetros al este de la capital San José, lugar desde el que ha expulsado importantes cantidades de materiales desde el año 2014, cuando inició un proceso de desgasificación que incluso llegó a provocar erupciones de gases, cenizas, bloques y piedras de hasta 4 kilómetros de altura.

No obstante, esta actividad se ha moderado en los últimos meses, aunque la emisión pasiva de pequeñas expulsiones continúa.

La dispersión de cenizas de este día, como en ocasiones anteriores, se vio impulsada por las condiciones del tiempo típicas de la temporada seca costarricense, con vientos que impulsaron las cenizas de este a oeste, como es normal en la zona.

Las cenizas pueden alcanzar incluso un diámetro de 50 kilómetros alrededor del volcán; sin embargo, las partículas más finas pueden movilizarse a distancias mayores si las condiciones climáticas lo permiten.

Las emisiones del Turrialba han causado serios estragos en Costa Rica, país en el que incluso han llegado a provocar el cierre de su principal aeropuerto (Juan Santamaría) y, más ocasionalmente, cancelaciones de vuelos internacionales.

Las cenizas además han provocado problemas en las zonas aledañas al coloso y al Valle Central costarricense, donde se ubican las ciudades más densamente pobladas y han ocasionado la oxidación, la contaminación y la quema de todo tipo de materiales.

Además, las caída de estas partículas ha sido inconveniente para la salud visual, dermatológica y respiratoria de personas y animales, un punto por el que las autoridades locales han solicitado precaución en distintos momentos desde el inicio de las actividades volcánicas.