BRASILIA, 28 mar (Xinhua) -- Los presidentes de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia, y del Senado, Eunicio Oliveira, condenaron hoy el atentado contra el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, en el estado de Paraná (sur).
El ataque a la comitiva del ex mandatario tuvo lugar en la ciudad de Quedas del Iguazú, en Paraná, la noche del martes.
Uno de los autobuses atacados, que estaba ocupado por periodistas, tuvo dos perforaciones en la carrocería y una en el vidrio, mientras que otro autobús también fue alcanzado por un disparo, pero en ambos casos no hubo heridos.
En su cuenta de la red social Twitter, Maia, del partido Demócratas (DEM), calificó el ataque como "gravísimo" y exigió una rápida investigación y soluciones "firmes y rápidas" para terminar con ese tipo de violencia.
"Fue el punto final de algunos días de absurdos, una tentativa de inviabilizar la movilización del ex presidente", afirmó.
Por su parte, Oliveira, del Movimiento Democrático Brasileño (MDB), lamentó el ataque a Lula y las amenazas contra el juez Edson Fachin, relator de la operación "Lava Jato" (Autolavado) en el Supremo Tribunal Federal (STF), al calificarlos como "atentados a la democracia".
El magistrado brasileños denunció este miércoles, en entrevista con una televisora local, que él y su familia han recibido amenazas.
"No vamos a tolerarlo. Tengo la convicción de que vamos a encontrar los culpables y castigarlos. La democracia no acepta ese tipo de comportamiento", indicó.
"Es lamentable que, en un régimen democrático, las personas quieran, por la fuerza, contrariar la voluntad de la población brasileña, de la justicia y del parlamento. Quien hace vida política, quien está expuesto, quien defiende causas, no puede tener miedo de amenazas", enfatizó.
El presidente de Brasil, Michel Temer, también lamentó el ataque contra Lula y consideró necesario "pacificar el país".
Precandidatos a la presidencia de diversas fuerzas políticas condenaron el atentado contra la caravana de Lula, quien esta noche realizará un acto político en la ciudad de Curitiba, capital del estado de Paraná, donde ocurrió el ataque.