NACIONES UNIDAS, 23 jul (Xinhua) -- El alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Raad Al Hussein, expresó hoy una gran preocupación por la situación de derechos humanos de los palestinos dada la reciente violencia fronteriza entre la Franja de Gaza e Israel.
En un informe para el Comité para el Ejercicio de los Derechos Inalienables del Pueblo Palestino transmitido por video a Ginebra, Zeid dijo que los palestinos en Gaza enfrentan "desempleo y pobreza crecientes, una infraestructura cada vez más deteriorada, una dependencia alimentaria récord y un horizonte político desolado", lo cual es "totalmente creado por el hombre y por completo evitable".
Sobre las muertes ocurridas cerca de la frontera entre Israel y Gaza durante las manifestaciones por la Gran Marcha del Regreso, Zeid dijo que el Consejo de Derechos Humanos decidió en mayo enviar una comisión internacional independiente para investigar el asunto. "Es esencial que las autoridades cooperen con la futura comisión para impulsar la rendición de cuentas sobre estas muertes".
Zeid agregó que será "vital atender las causas de raíz de las recientes manifestaciones", a saber, las "terriblemente inadecuadas condiciones de vida" en Gaza.
En su declaración, Zeid mencionó la adopción por parte de Israel de la Ley Básica sobre el Estado-nación y dijo que "establece una discriminación inherente contra las comunidades no judías, sobre todo los ciudadanos árabes de Israel y los residentes del Jerusalén Oriental ocupado".
Además hizo énfasis en que la planeación y la construcción de asentamientos israelíes continúa sin cesar en toda Cisjordania ocupada. "Desde principios de 2018, los ataques de los colonos contra los palestinos se han disparado para llegar al promedio mensual más alto de los últimos tres años".
En cuanto a las demoliciones y desplazamientos forzados de familias palestinas en Cisjordania ocupada y Jerusalén Oriental, siguen ocurriendo mes con mes, dijo Zeid. Un total de 366 estructuras fueron demolidas en el último año sólo en Cisjordania, entre ellas 11 escuelas.
Otras violaciones al derecho internacional citadas por Zeid incluyen crecientes restricciones al desplazamiento, intimidación diaria por parte de los soldados en los puestos de revisión, violencia y acoso por parte de los colonos, transferencias forzadas y la continua existencia de la valla de separación.
Zeid también subrayó la difícil situación de los menores palestinos detenidos por Israel, algunos sin cargos en su contra, de conformidad con el llamado sistema de "detención administrativa". Cerca de 440 palestinos se encuentran detenidos actualmente.
"Estos ataques contra los derechos fundamentales destruyen la confianza en las instituciones, eliminan las estructuras sociales que permiten la solución pacífica de las disputas y generan un polvorín en el que cualquier conflicto puede conducir a consecuencias severas e impredecibles", concluyó.
Cuatro palestinos murieron el viernes y cerca de 210 resultaron heridos durante intensos enfrentamientos entre Israel y Hamas, el más serio en la Franja de Gaza gobernada por Hamas desde el conflicto de 2014 que dejó miles de muertos.
El ataque comenzó el viernes después de que un soldado israelí murió durante actividad operativa cerca del sur de la Franja de Gaza. El soldado fue el primero en ser baleado por combatientes palestinos desde 2014, informaron las Fuerzas de Defensa Israelíes.
El viernes pasado, Hamas anunció que llegó a un acuerdo de cese al fuego con Israel gracias a los esfuerzos de Egipto y de la ONU.
Desde fines de marzo cuando comenzaron las protestas de la Gran Marcha del Regreso, el número de palestinos muertos supera los 140. Las protestas, que alcanzan su punto máximo los viernes, exigen el regreso de los refugiados palestinos y la suspensión del bloqueo israelí a Gaza.