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Washington, 26/12/2018(El Pueblo en Línea) - Debido a las diferencias entre las condiciones de vida en el espacio y en la Tierra, adaptarse a la vida en la superficie después de vivir en la Estación Espacial Internacional (EEI) puede ser una tarea más difícil de lo que parece, destaca Sputnik.
Para demostrar uno de los efectos secundarios que sufren los astronautas al volver a la Tierra, Drew Feustel publicó un vídeo de su recuperación tras pasar 197 días en la EEI.
Se trata de la dificultad de andar en línea recta con los ojos cerrados y de la necesidad de entrenarse para poder hacerlo de nuevo. Se sabe que mientras los astronautas están en el espacio se pasan unas dos horas diarias entrenando para mantener el tono muscular y la masa ósea.
Pero incluso estos entrenamientos no garantizan que al volver a la Tierra pueden andar con normalidad. Precisamente por ello, los astronautas pasan por una serie de rigurosas pruebas físicas y médicas tras su retorno.
Gracias a la información que se obtiene, los científicos pueden estudiar los efectos de una estancia prolongada en el espacio sobre el organismo humano.
Es un conocimiento muy importante de cara a las futuras misiones espaciales de largo plazo, como el viaje a Marte.