RIO DE JANEIRO, 15 ene (Xinhua) -- El gobierno brasileño estudia facilitar la abertura del mercado de armas de fuego a empresas extranjeras, después de que el presidente Jair Bolsonaro firmara hoy un decreto que facilita el acceso a las armas por parte de la población.
En declaraciones a la prensa, el ministro de la Casa Civil, Onyx Lorenzoni, afirmó que el gobierno está estudiando abrir el mercado nacional para la producción de armas a otras empresas aunque tengan el 100 por ciento de capital extranjero. Y estas fábricas traen tecnología para el país, traen nuevos empleos, inversiones".
Sin embargo, Lorenzoni descartó que el gobierno brasileño ofrezca incentivos fiscales a las empresas que fabrican armas de fuego para que se instalen en el país, aunque sí que admitió que hay la posibilidad de una reducción de tasas e impuestos que inciden sobre las armas.
La empresa Taurus Armas, antigua Forjas Taurus, detiene prácticamente el monopolio del mercado de fabricación de armas de fuego en Brasil. Del 1 al 14 de enero, con la llegada de Jair Bolsonaro al poder, los papeles de la empresa en la bolsa de Sao Paulo subieron un 60 por ciento, aunque este martes, tras las palabras de Lorenzoni, se desplomaron un 22 por ciento.
El presidente de Brasil firmó hoy un decreto que permite que los ciudadanos brasileños con más de 25 años puedan comprar hasta cuatro armas de fuego para guardar en casa. El texto regula el registro, la posesión y la comercialización de armas de fuego y munición en el país, una de las principales promesas de campaña de Bolsonaro.
El decreto entrará en vigor después de su publicación en el Diario Oficial de la Unión y se refiere exclusivamente a la posesión de armas, puesto que el porte de arma de fuego no fue incluido en el texto.
Los ciudadanos deberán cumplir una serie de requisitos, como pasar por evaluación psicológica y no tener antecedentes penales, pero no habrá necesidad de una justificación para la posesión del arma.
Además de militares y agentes públicos del área de seguridad activos e inactivos, podrán adquirir armas de fuego los residentes de áreas rurales y urbanas con índices de más de 10 homicidios por 100 mil habitantes, según datos del Atlas de la Violencia 2018, producido por el Foro Brasileño de Seguridad Pública.
Dueños y responsables de establecimientos comerciales o industriales también podrán adquirir el armamento, así como coleccionistas de armas, tiradores y cazadores, debidamente registrados en el Comando del Ejército.
El límite de cuatro armas podrá ser flexibilizado si el ciudadano demuestra la necesidad de adquirir más, como, por ejemplo, ser poseedor de más de cuatro propiedades rurales o urbanas.
"En la legislación anterior se podría comprar media docena de armas, pero en la práctica no se podía comprar ninguna, o bien era muy difícil alcanzar ese objetivo. Con la legislación actual, se puede comprar hasta cuatro, y llenando esos requisitos, el ciudadano de bien, con toda certeza, podrá hacer uso de esas armas ", afirmó Bolsonaro este martes.
De acuerdo con el decreto, si en la residencia hay niño, adolescente o persona con enfermedad mental será necesario presentar una declaración de que existe una caja fuerte u otro lugar seguro con cerradura para el almacenamiento del arma.
El registro y el análisis de la documentación continúan bajo la responsabilidad de la Policía Federal, pero, según Bolonaro, en el futuro, de acuerdo con la demanda, podrán existir convenios con las policías militares y civiles para ese trabajo.
El plazo para la renovación del registro del arma de fuego pasará de cinco años a 10 años, y los registros activos, hechos antes de la publicación del decreto, se renovarán automáticamente por el mismo período.