MADRID, 16 ene (Xinhua) -- El Barcelona se acaba de proclamar campeón de invierno de la Liga española y su máxima estrella, Leo Messi, sigue marcando tendencias además de mostrar una enorme eficacia goleadora.
Tras finalizar la primera vuelta, el conjunto azulgrana es primero en la clasificación con cinco puntos sobre el Atlético de Madrid y en medio de la crisis sin final a la vista del Real Madrid.
Hace un par de años, algunos analistas pronosticaron que se empezaba a ver ya el final del argentino al rebasar los 30 años, pero el gran momento de juego del delantero, su olfato goleador cada vez más fino y su protagonismo en los partidos hacen que siga siendo imprescindible.
En esta primera vuelta, Leo Messi, señala hoy el Mundo Deportivo, ha sido el máximo goleador, con 17 goles, y también el mayor factor desiquilibrador.
Pese a que el Barcelona atravesó una crisis de resultados con su derrota en casa ante el Betis y luego con varios empates, el Real Madrid no supo aprovechar la situación para acercarse al conjunto azulgrana, que lidera con firmeza la Liga.
El domingo pasado, el argentino pasó a los anales de la historia del fútbol español al marcar ante el Eibar su gol 400 en los 435 partidos que ha disputado en la máxima categoría.
Messi ha ido de menos a más a lo largo de esta primera vuelta, y como el propio jugador ha declarado en más de una ocasión, la Liga es importante, pero su verdadera meta es ganar la Champions League, torneo en que sigue reinando el Real Madrid.
Otras dos de las metas de Messi son ganar la Copa América y obtener su sexto Balón de Oro, lo que sería un hito en el fútbol mundial.