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Presidente de Chile llama a acuerdo por una nueva Constitución

SANTIAGO, 12 nov (Xinhua) -- El presidente de Chile, Sebastián Piñera, llamó este martes a trabajar y a lograr un acuerdo por una nueva Constitución para el país dentro del marco de la institucionalidad con una "clara participación ciudadana".

El mandatario instó en una rueda de prensa, que celebró la noche de este martes sin responder preguntas de los periodistas, a discutir una nueva Carta Magna con un plebiscito ratificatorio para que "los ciudadanos participen, no solo en la elaboración sino que en la última palabra en su aprobación, de la construcción del nuevo pacto social".

"Estos son tiempos de unidad, tiempos de grandeza, eso es lo que todos nuestros compatriotas nos piden, el firme propósito de que esta situación tiene que terminar y tiene que terminar ahora, y tomar plena conciencia del esfuerzo y compromiso que pongamos cada uno de nosotros", afirmó.

La actual Constitución chilena que se promulgó en 1980, durante la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), pese a que ha tenido decenas de reformas, siendo la más importante de 2005, se considera ilegítima por su origen y porque no satisface las demandas de la población.

El mandatario chileno explicó que los acuerdo que debe lograr el país, a parte de una nueva Constitución, son un acuerdo por la paz puesto que la "actual situación de violencia atenta contra la democracia y el Estado de Derecho y vulnera libertades y derechos de todos y especialmente de los mas vulnerables".

Y un acuerdo por la justicia que tiene como propósito, abundó, poder buscar "todos juntos una robusta agenda social que nos permita avanzar hacia un Chile más justo".

"Debemos y tenemos que impulsar todos juntos estos tres acuerdos, la grave situación que vive nuestro país hace cuatro semanas exige dejar de lado todas las pequeñeces y actuar con la grandeza y seguridad que el patriotismo que nos exige", dijo.

Piñera hizo estas declaraciones en el marco de un nuevo llamado a paro nacional, convocado para este martes por la Central Unitaria de Trabajadores (CUT) de Chile.

En este contexto, unas 80.000 personas se congregaron en la Plaza Italia de Santiago para protestar por demandas sociales, según los cálculos del gobierno. Las manifestaciones y paralización de actividades se plegó también en las regiones.

Piñera anunció que invocarán la Ley de Seguridad del Estado contra todas aquellas personas que hayan incitado, participado o promovido la comisión de delitos que "hemos conocido durante la jornada".

Millones de chilenos se han volcado a las calles durante las últimas cuatro semanas para exigir cambios al sistema de pensiones, mejores salarios y profundas reformas al modelo económico y político, alzando nuevamente la idea de escribir una nueva Constitución.

Según un informe emitido el domingo pasado por el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) de Chile, que trabaja con organismos de Naciones Unidas, las manifestaciones sociales en Chile han dejado a la fecha 2.009 heridos en hospitales, de los cuales 197 tienen heridas oculares, 5.629 personas detenidas, y 283 acciones judiciales presentadas por torturas, violencia y homicidios.

En tanto, el Poder Judicial de Chile puntualizó que se contabilizaron 23 personas muertas, de las cuales cinco fallecieron a manos de agentes del Estado, y dos bajo la custodia de agentes policiales o militares.

La Justicia chilena prohibió este martes a la policía chilena usar armas letales y balines en protestas pacíficas.