BEIJING, 10 ago (Xinhua) -- Un oficial de la policía japonesa que sirvió en China durante la Segunda Guerra Mundial ordenó la tortura de un gran número de chinos, de acuerdo con la última de una serie de confesiones de criminales de guerra japoneses publicadas.
La confesión escrita por Shigeo Hachisuka, oficial de policía que sirvió en el nordeste de China de 1918 a 1945, apareció publicada hoy domingo en la página web de la Administración Estatal de Archivos del país.
Hachisuka sirvió al principio como oficial de policía en la ciudad de Lyushun, provincia nororiental china de Liaoning, posteriormente ocupada por Japón, y más tarde en la Policía de Seguridad Ferroviaria de Mukden de "Manchukuo", el estado títere establecido por el Imperio de Japón en el nordeste de China entre 1931 y 1945. Fue arrestado en septiembre de 1945.
En su calidad de alto oficial de policía, Hachisuka personalmente arrestó y ordenó las detenciones de numerosos chinos que lucharon contra la invasión y la ocupación japonesa de China. La mayoría de ellos fueron torturados tras sus detenciones.
De acuerdo con su confesión escrita en diciembre de 1945, durante una operación en julio de 1943 para arrestar a un joven chino que había ayudado a las tropas antijaponesas, a Hachisuka y sus subordinados se les negó la entrada a una casa que querían registrar. Uno de ellos disparó a través de la puerta y mató a un anciano, quien posteriormente fue identificado como el padre del joven chino.
Se trata de la más reciente de un total de 45 confesiones de criminales de guerra nipones que la Administración Estatal de Archivos de China pretende publicar. Se ha emitido una cada día desde el pasado 3 de julio.
La medida se ha tomado en respuesta a las negaciones de los crímenes de guerra japoneses en China por parte del primer ministro nipón, Shinzo Abe, y de políticos derechistas de Japón.