BRASILIA, 5 oct (Xinhua) -- La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), expresó este domingo, tras la primera vuelta de las elecciones generales, su confianza en obtener la reelección en la segunda vuelta a realizarse el 26 de octubre.
En discurso en el comité de campaña del PT en Brasilia, donde la esperaban centenares de simpatizantes, Rousseff agradeció a los electores y a sus partidarios.
"Una vez más el pueblo brasileño me honró con su confianza al darme la victoria en esa disputa de la primera vuelta", afirmó la mandataria, quien obtuvo un 41 por ciento de los votos en la jornada de hoy.
Rousseff disputará la segunda vuelta con el segundo colocado, el senador Aécio Neves, del Partido Social Demócrata Brasileño (PSDB), que cosechó un 34 por ciento de los sufragios.
La mandataria comenzó agradeciendo a los electores que la apoyaron para un segundo mandato de cuatro años.
"Quiero agradecer al elector y electora anónimos, que fueron a las urnas a registrar su voto. Siento como si hubiese recibido un mensaje simple, que dice que debo seguir adelante, continuar en esa lucha junto a esos electores para cambiar Brasil", señaló.
Agradeció también al vicepresidente y compañero de fórmula Michel Temer, del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), al PT y a los partidos aliados, a los movimientos sociales y el apoyo de las centrales sindicales.
Especialmente, agradeció la militancia y a "nuestro líder, amigo y compañero", el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva, su mentor político, por "el sueño por un Brasil mejor".
"Como decíamos en tiempo de la resistencia, "la lucha continúa", y esa lucha será vencedora porque es la lucha de todo el pueblo brasileño", enfatizó.
La presidenta rindió homenaje también al difunto líder socialista Eduardo Campos, quien murió trágicamente en un accidente aéreo el pasado mes de agosto.
Dijo que entendió claramente el mensaje "de las urnas y las calles", que es el de continuar avanzando con los cambios iniciados doce años atrás, con la llegada al poder del PT de la mano de Lula da Silva.
"Garantizo que voy a hacer, así fue con el presidente Lula, un segundo gobierno mucho mejor que el primero", enfatizó.
Afirmó que su compromiso "arraigado y profundo" se expresa en la frase "gobierno nuevo, ideas nuevas".
"Son ideas para resolver el problema de la salud, creando una red de clínicas. Ideas nuevas en la seguridad, como hicimos en la Copa, creando una política integrada juntando sus fuerzas", señaló.
"Ideas nuevas para la educación, ampliando lo que hicimos correctamente, como el (programa) Ciencia sin Fronteras. Utilizando los recursos del (petróleo) presal para valorizar los profesores", afirmó.
"Ideas nuevas para la economía, controlando la inflaicón, pero sin ajustes, ni corte salarial, como tuvimos en los gobiernos del PSDB. Ideas nuevas en las políticas sociales. Quien sabe hacer es quien sabe hacer avanzar", dijo.
"Ideas nuevas para un nuevo ciclo de desarrollo, para un Brasil más productivo y más competitivo", resaltó.
Dijo que su gobierno tiene un fundamento moral basado en dos valores, uno la igualdad de oportunidades, y otro el combate sin treguas "duro, durísimo" a la corrupción.
Enfatizó también su convicción de que "tenemos que hacer la reforma política, que es la madre de todas las reformas".
"Vamos a hacer todo a nuestro alcance para conseguir la reforma político. Y todos sabemos que el primer paso es movilizar a la población en un plebiscito popular", señaló.
En el último tramo de su discurso, Rousseff atacó duramente al PSDB de su rival Aécio Neves, afirmando que "el pueblo brasileño acaba de decir que no quiere los fantasmas del pasado de vuelta".
"Tendremos otra vez una disputa con el PSDB, que gobernó para el tercio de la población, aquellos que quebraron al país tres veces, con desempleo masivo, con cortes salariales, que nunca promovieron políticas de reducción de la desigualdad", subrayó.
Según ella, el pueblo brasileño "no quiere más a aquellos que dieron la espalda al pueblo".
"No quiere más a los que promovieron una inserción internacional subordinada y se arrodillaban ante el FMI. A aquellos que trajeron el racionamiento de energía, que intentaron de introducir en la privatización a Petrobras, al Banco de Brasil, la Caixa Económica", señaló.
"Mis palabras finales son de unión y convocar a quienes trabajar por un Brasil más justo, más fraterno, a todos los brasileños y brasileñas a estar con nosotros, los que siempre estuvieron con nosotros y que en los últimos 12 años ganaron derechos", subrayó.
La mandataria manifestó también su orgullo por el hecho de que las elecciones se hayan realizado "de manera ordenada y que millones y millones de electores hayan ido a las urnas para mostrar la fuerza de la democracia".
"Vamos a la lucha porque la lucha es nuestro medio y Brasil precisa de cada uno de nosotros", concluyó.