China no es una "amenaza alimentaria" |
Por Percy Mischa
Pekín,17/10/2014(El Pueblo en Línea)-Según estadísticas recientes de la FAO, desde principios de los años 90 (entre 1990 y 1992) a la actualidad, la población con desnutrición crónica en todo el mundo se redujo en 209 millones, desde un 18,7% hasta un 11,3%. En este proceso, la contribución de China es muy relevante. Durante este período, 138 millones de chinos superaron la desnutrición crónica. El primer objetivo de los "Objetivos de Desarrollo del Milenio" de la ONU, incluye tres sub-objetivos, uno de ellos propone reducir a la mitad -entre 1990 a 2015- la población mundial con desnutrición. Según los cálculos de la FAO, China ya ha logrado este primer objetivo.
Desde el año 2004, la cosecha de cereales en China aumenta ininterrumpidamente. En la actualidad, la seguridad alimentaria está garantizada desde las reservas hasta los canales de consumo. Esta realidad no es sólo significativa para la propia China, también lo es para la estabilidad del mercado alimentario internacional. En realidad, el milagro sin precedentes del desarrollo económico de China y su exitoso sistema de seguridad alimentaria son distorsionados cuando se divulgan en algunos medios globales.
China todavía se enfrenta a muchos desafíos en aspectos como el desarrollo sostenible de la producción alimentaria, la protección del medio ecológico, la mejora en la seguridad de productos alimentarios, la reducción del malgasto de cereales, las transformaciones debido a la urbanización . El gobierno chino se esfuerza por resolver con eficiencia estos serios problemas aún existentes.
Además de garantizar la buena situación de la producción de cereales, China también ayuda activamente a los otros países, especialmente a los países en vías de desarrollo para que mejoren su capacidad de producción de cereales. Históricamente, Zimbabwe había sido la “cesta de los panes” de África del Sur, pero debido a las sanciones económicas, la producción de cereales entró en dificultades. Hoy día, con la ayuda de China, Zimbabwe está recuperando su liderazgo en el sector. En Malawi y Nigeria, las asistencias financieras y técnicas de China también han aportado una ayuda enorme a la producción local de cereales.
Durante mucho tiempo, algunos medios se enfocan en difundir la supuesta “amenaza alimentaria” de China. Basta con reflexionar las siguientes preguntas para demostrar la falsedad del supuesto: ¿China ha puesto a circular dentro del mercado internacional su exceso de alimentos, boicoteando la producción de cereales de otros países? ¿China ha comprado tierras de cultivo en el extranjero, especialmente en África? ¿China ha socavado los patentes agrícolas de otros países en vías de desarrollo? ¿Las empresas chinas han adquirido -a gran escala- empresas de semillas de otros países para monopolizar el sector? Todas las respuestas admiten un " No" rotundo. Entonces, ¿Cómo se puede acusar a China de ser una “amenaza alimentaria”?
Desde una estrategia a largo plazo, la seguridad alimentaria depende de la conjugación de diversos factores, tales como un adecuado marco político-jurídico, buena disponibilidad de recursos humanos y financieros, un mecanismo eficiente de coordinación, un agudo análisis que permita tomar decisiones objetivas y una flexibilidad productiva que evalúe circunstancias como desastres naturales o cambios en la población. Se debe mantener la confianza en la seguridad alimentaria de China.La nación es consciente de que hay que proteger las tierras cultivables y fomentar las inversiones para mejorar el rendimiento por metro cuadrado de superficie. Los ajustes oportunos en la política de apoyo a la agricultura, la implementación de modernas tecnologías moderna, la formación profesional y la garantía del precio mínimo de compra, ayudará a garantizar la seguridad alimentaria de China.
(El autor es el representante de la FAO en China)