CARACAS, 8 Dic (Xinhua) -- El presidente venezolano, Nicolás Maduro, denunció este lunes que la nación suramericana es víctima de un bloqueo financiero, que le impide acceder a los créditos necesarios para garantizar la estabilidad económica tras el descenso internacional en los precios del petróleo.
Durante el evento de clausura del I Congreso del Gran Polo Patriótico -organización que aglutina a movimientos revolucionarios del país-, el Jefe de Estado reiteró, como en otras ocasiones, que existe una guerra permanente desde el plano nacional e internacional orientada a menoscabar el proyecto de gobierno.
Desde el Cuartel de la Montaña "4 de Febrero", lugar donde reposan los restos del líder de la revolución bolivariana, Hugo Chávez, el mandatario suramericano cuestionó que algunos sectores empresariales del país encargados de llevar adelante las actividades de importación, especulen con los precios finales de las mercancías.
En este sentido, aseguró que desde el Ejecutivo se ha podido constatar que el 99% de los productos que ingresan al país, son adquiridos a través del Centro Nacional de Comercio Exterior (Cencoex) o el Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad I), mecanismos cuyas tasas son preferenciales y no ascienden a 11 bolívares por dólar.
"El dólar paralelo en la realidad económica venezolana no existe, nos lo quieren imponer (...) es una guerra que debemos asumir, estoy seguro de que los vamos a ganar" , precisó Maduro.
Asimismo, el Jefe de Estado manifestó que se han establecido políticas ahorrativas y productivas que han permitido neutralizar la repercusión social que podía propiciar la guerra económica.
Indicó que uno de esos efectos deparaba en una hambruna generalizada, y "en un desempleo abierto atroz" .
Sin embargo, el presidente venezolano apuntó que pese a otros factores como la sequía, se registró un superávit en la producción de rubros como el arroz del 30%.
Además, el Jefe de Estado ratificó que los programas sociales emanados por el gobierno continúan, y llamó a reforzar la revisión de las políticas estatales para garantizar la eficiencia del mismo.