MADRID, 9 dic (Xinhua) -- El tren de mercancías que partió de China el 18 de noviembre pasado llegó hoy a Madrid tras recorrer 13.000 kilómetros desde la ciudad de Yiwu (este de China) y atravesar Kazajistán, Rusia, Bielorrusia, Polonia, Alemania, Francia y España, donde entró por la zona fronteriza de Irún.
Este tren, el primero de estas características entre los dos países, ha sido concebido como una prueba para analizar la posible implantación de una ruta regular, y está operado por las empresas alemanas IRS y DB Schenker Rail, a través de su filial Transfesa, participada por la española Renfe.
Todos los medios escritos, radios y televisiones se han hecho eco de este importante acontecimiento como un tren de pruebas, que llegó a la estación madrileña de mercancías de Abroñigal, destacan fuentes de Renfe.
Ahora, según las mismas fuentes, tras finalizar esta fase de pruebas, se evaluará la posibilidad de establecer una línea regular entre China y España, que podría estar operativa a partir de la primavera de 2015 (hasta ahora las únicas conexiones regulares entre China y Europa terminan en Alemania), añaden las fuentes.
Otro aspecto importante ha sido que las locomotoras se han cambiado cada 800 kilómetros, aproximadamente, y se han realizado tres descargas de contenedores a lo largo de la ruta. En concreto, en las fronteras de Dostyk/Alashankou, Brest/Malaszewicze y en Irún (España).
En las instalaciones logísticas del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias de España (Adif), situadas en Irún, se han realizado las operaciones de manipulación de los contenedores necesarias para cubrir la última etapa del trayecto.
El tren, que transporta bienes de consumo fabricados en Yiwu, partió de esa ciudad, en la provincia oriental china de Zhejiang, con 40 contenedores y el peso bruto (incluyendo los contenedores y la carga), de 1.400 toneladas.
En principio todo está previsto para que el tren vuelva a recorrer otros 13.000 kilómetros que separan Madrid de Yiwu después de las Navidades con una carga de jamón, vino y aceite de oliva, que llegará a tiempo para la celebración del Año Nuevo chino, según distintos medios locales.
Por otra parte, las mismas fuentes de Renfe indican que se trata de la tercera ruta ferroviaria directa entre China y Europa (las otras dos enlazan con Alemania), por la que los productos llegan a Madrid en 21 días, frente a los aproximadamente 30 que necesitan para recorrer esa misma distancia en barco.
A la llegada del tren al centro Logístico de Madrid-Abroñigal acudieron la ministra de Fomento, Ana Pastor; la alcaldesa de Madrid, Ana Botella; y el encargado de negocios de la embajada china en la capital de España, Huang Yazhong.
Por último, la importancia de que este tren haya partido de Yiwu también radica, según las fuentes, en que es una ciudad de casi 1,5 millones de habitantes, en la que se extiende el mayor mercado mayorista del mundo, con la exhibición y venta de más de medio millón de productos diferentes, de unos 60.000 suministradores.
Y sin olvidar que la mayoría de los chinos residentes en España proviene de la provincia de Zhejiang.