SANTO DOMINGO, 20 dic (Xinhua) -- Autoridades sanitarias de República Dominicana descartaron hoy que un paciente llegado de Africa la semana pasada e internado en un hospital del norte del país con fiebre y deshidratación severa, esté infectado por el virus del Ebola.
El Ministerio de Salud confirmó que el paciente, un dominicano de 32 años, fue recluido en un centro de atención primaria de la ciudad de Santiago de los Caballeros, 155 kilómetros al noroeste de la capital, pero aseguró que el interno presenta un tipo de patología diferente a la mortal enfermedad.
El caso fue reportado por medios locales que informaron que el eventual portador viajó en mayo a Guinea Ecuatorial y volvió de ese país africano a República Dominicana el pasado día 15 de este mes.
"Al joven se le dará de alta entre este sábado y el martes", dijo a la prensa local Arisnachy Gómez Díaz, el director del centro de salud donde fue internado en "condiciones muy malas" de salud, "debido a una deshidratación y a algunos síntomas febriles".
Gómez agregó que inmediatamente fue recibido el paciente en el hospital, el caso fue comunicado al Departamento de Epidemiologia del Ministerio de Salud en Santo Domingo, que hoy confirmó haber cumplido con el protocolo establecido por los organismos internacionales para descartar la presencia del ébola en el país.
El paciente no fue identificado por las autoridades.
República Dominicana ya había desmentido a mediados de septiembre la posible presencia de la fiebre del ébola en el país, cuando las autoridades aseguraron tener ya un plan de "respuesta rápida" ante el eventual ingreso de la enfermedad a territorio dominicano.
La rápida respuesta del Ministerio de Salud se produjo a raíz del rumor de que una persona había fallecido en el país debido al virus del Ebola.
A fines de octubre, República Dominicana prohibió la entrada de personas que en los últimos treinta días hayan visitado alguna nación afectada por casos endémicos de ébola, como parte de las medidas adoptadas por el gobierno dominicano para evitar el ingreso de la enfermedad al país.
Además, las autoridades anunciaron la habilitación de una unidad médica para el diagnóstico a tiempo de cualquier caso clínico de ébola y su traslado desde el sitio de identificación hasta el lugar de atención especializada aislada, así como la capacitación de todo el personal médico a nivel nacional.
Con su decisión, República Dominicana se unió a otros ocho países de la región, incluyendo su vecino Haití, que han impuesto algún tipo de restricción a la entrada de personas provenientes sobre todo de países de Africa occidental afectados por la mortal enfermedad.
Las autoridades dominicanas también anunciaron en agosto el reforzamiento de la vigilancia en puertos y aeropuertos nacionales.
Dos meses después, el gobierno declaró una "fase de advertencia" ante la aparición del primer caso del mal en Estados Unidos, donde la comunidad dominicana asciende a un millón y medio de personas y representa el quinto conglomerado hispano de mayor presencia en ese país.
A principios de noviembre, el Ministerio de Salud dirigió un simulacro de la llegada de un paciente infectado por el virus del Ebola al país, con el fin de evaluar los procedimientos de identificación, aislamiento, transporte y manejo de casos sospechosos de la enfermedad.
La cartera reconoció algunas debilidades en la simulación, como el hecho de que la ropa del supuesto infectado fue olvidada en un lugar de la terminal, y entregada luego por una mujer al personal médico ubicado en el principal aeropuerto del país.
Al menos 7.373 personas, principalmente de Sierra Leona, Guinea, Liberia y Senegal, han muerto en el peor brote de ébola desde que la enfermedad fue identificada en 1976, de acuerdo con un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS) difundido hoy.
La enfermedad, que ha afectado a otras 19.031 personas, se propaga a través de las mucosas y de fluidos o secreciones corporales como heces, orina, saliva y semen de personas infectadas, y según la OMS es muy difícil de controlar.