BEIJING, 30 dic (Xinhua) -- Gracias a la incansable promoción de los líderes chinos, el sector ferroviario del país experimentó, en 2015, una buena cosecha en los mercados internacionales que culminó, en las postrimería del año, con el lanzamiento de proyectos señeros en Asia y Europa.
El 19 de diciembre, Tailandia y China lanzaron la construcción de una línea férrea que enlazará la capital tailandesa, Bangkok, con la ciudad nororiental de Nong Khai, próxima a Laos, marcando así el inicio de la cooperación bilateral para desarrollar el primer ferrocarril tailandés con doble vía de ancho internacional.
Con 845 kilómetros, esta vía será parte de la columna vertebral del sistema transasiático de transporte ferroviario.
Poco después, el 23 de diciembre, comenzó la construcción del tramo serbio de la vía férrea entre Serbia y Hungría, materializándose así un proyecto emblemático entre China y los dos países europeos.
Cuando esté completada a mediados de 2017, la vía de alta velocidad de 350 kilómetros, ejecutada por un consorcio liderado por China, reducirá el tiempo de viaje entre Belgrado y Budapest a menos de tres horas desde la media actual de ocho.
Los dos proyecto, con un enorme potencial para transformar el panorama de cooperación regional, son sólo los últimos frutos de la diplomacia ferroviaria china, una estrategia que busca una mejor interconectividad y una cooperación más estrecha con sus países socios.
EL PRIMER MINISTRO, UN "SUPERVENDEDOR"
Desde 2013, los líderes chinos no han escatimado esfuerzos para promocionar la tecnología y equipamientos ferroviarios del país durante sus visitas al extranjero y reuniones multilaterales.
En noviembre de este año, el premier chino, Li Keqiang, considerado un "supervendedor" en el sector nacional ferroviario, se llevó a los líderes de 16 naciones de Europa Central y Oriental (ECO) a un viaje en el tren bala de Suzhou a Shanghai, en el este de China, para mostrarles la tecnología de su país.
El viaje de 20 minutos, que sirvió como colofón del Foro China-ECO, fue interpretado como una publicidad sin precedentes para el sector ferroviario de alta velocidad chino al implicar a tantos destacados líderes extranjeros.
En mayo, durante una visita oficial a Brasil, Li viajó en la hacía poco inaugurada línea de metro de Río de Janiro que utiliza trenes construidos por China.
Durante el trayecto, el premier aseguró que China tiene tecnología de calidad y una enorme capacidad de producción de equipos de transporte ferroviario, además de que sus productos tienen una gran relación calidad-precio y se adaptan a varios mercados.
FERROCARRIL CHINO UNE AL MUNDO
Después de años de mejora e innovación tecnológica, China ha elevado sus tecnologías de ferrocarriles de alta velocidad al nivel más avanzado del mundo.
Se estima que para finales de 2015, la longitud de los ferrocarriles de China alcanzará los 120.000 kilómetros, únicamente superada por Estados Unidos.
China también cuenta con la red ferroviaria de alta velocidad más grande del orbe, con sus actuales 16.000 kilómetros representando más de la mitad de las líneas existentes en todo el planeta.
Los ferrocarriles construidos con inversiones chinas han generado una enorme eficiencia económica en diversas partes del mundo.
En Asia, una importante arteria ferroviaria que conecta a China, Laos y Tailandia está tomando forma. La línea reducirá considerablemente los gastos en logística para las naciones de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN, siglas en inglés) y facilitará el comercio y los viajes en la región.
En Africa, los ferrocarriles construidos por China han sido o serán el eje del sistema de transporte público local y un componente clave del crecimiento en varios países, entre ellos Nigeria y Etiopía.
En Sudamérica, los trenes hechos en China cubren la ruta de cercanías Mitre en Buenos Aires, Argentina, así como una línea de metro en la ciudad brasileña de Río de Janeiro.
En Europa, además del actual proyecto ferroviario Serbia-Hungría, los trenes chinos también operarán muy pronto en Macedonia.
DESARROLLO COMUN
El ferrocarril se ha convertido en un importante componente de la diplomacia de China después que el presidente Xi Jinping presentara en 2013 la iniciativa de la cooperación internacional en la construcción de la Franja Económica de la Ruta de la Seda y la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI (conocida popularmente como iniciativa de "la Franja y la Ruta"), dirigida a reavivar las antiguas vías comerciales de la Ruta de la Seda que abarcan Asia, Africa y Europa.
La cooperación en infraestructura y el mejoramiento de la interconectividad regional se incluyen entre las principales prioridades de China en la implementación de la iniciativa de "la Franja y la Ruta".
La diplomacia del ferrocarril de China tiene sus raíces además en el hecho de que las tecnologías ferroviarias chinas no son únicamente tan confiables como las de los países desarrollados, sino que ofrecen costos más económicos.
La construcción de ferrocarriles en el exterior y la exportación de equipos y tecnologías relacionados conlleva a situaciones de beneficio mutuo para China y sus socios extranjeros, pues este tipo de cooperación facilita el empeño de China de mejorar su economía nacional y permite a los países socios disfrutar de todos los intereses de estos proyectos a menor costo.
Al intervenir en un foro a mediados de diciembre, el ministro malasio de Transporte, Liow Tiong Lai, señaló que la iniciativa de "la Franja y la Ruta" de China y la cooperación ferroviaria en particular brindan nuevas oportunidades para muchos países, especialmente los miembros de la ASEAN.
"La importancia de la conectividad como un motor del crecimiento no puede ser subestimado. Es por ello que el transporte es uno de los sectores clave para la cooperación Malasia-China, con el ferrocarril como eje central", puntualizó el ministro malasio.
En la medida que la industria ferroviaria china se hace global, existe además el espacio para la cooperación entre China y los países desarrollados, quienes pueden trabajar juntos en la producción de equipos económicos y de alta calidad, así como desarrollar grandes mercados en terceros países.
Observadores consideran que la iniciativa de China respecto a la cooperación internacional en la construcción de redes de infraestructuras en el marco de "la Franja y la Ruta" facilitaría el desarrollo común, ya que permite a las naciones participantes aprovechar mucho mejor su fuerza comparativa.
Huang Bin, especialista chino del grupo de expertos tailandés Centro de Investigación Kasikorn, destacó que el proyecto ferroviario entre Tailandia y China, una vez completado, servirá de modelo de la iniciativa de "la Franja y la Ruta" y demostrará al mundo cómo este tipo de proyectos puede fortalecer la integración económica regional.