Bolivia continúa con la mora bancaria más baja de la región

Actualizado a las 10/03/2016 - 08:41

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Bolivia sigue con el índice de mora bancaria más bajo de toda la región latinoamericana, al registrar 1,7 por ciento de créditos impagos, y se descarta que esa cifra sea preocupante cuando hace más de una década llegaba al 10 por ciento, informó hoy el Ministerio de Economía.

El ministro Luis Arce manifestó a la prensa en La Paz que el leve incremento de la mora de 1,5 por ciento a 1,7 por ciento en los últimos años no obedece a las políticas económicas que implementó su gobierno para regular los créditos productivos y de vivienda social.

"Bolivia tiene la mora bancaria más baja de toda la región, es decir, que estos 10 años le hemos cambiado la perspectiva de la mora, porque hemos generado confianza en el sistema bancario a través de la estabilidad macroeconómica y financiera que atraviesa el país", aseveró la autoridad cabeza del sector económico.

El panorama halagüeño en el sistema financiero ha permitido a Bolivia lograr la mora más baja de la región. "El año 2005 éramos el país con más mora con 10 por ciento, ahora somos el país con menos mora con 1,5 por ciento", remarcó.

La tasa de morosidad (créditos impagos) se ha mantenido en un promedio de 1,6 por ciento entre 2011 y 2013, y en 2014 y el 2015 uno de los niveles de mora históricamente más bajos al registra 1,5 por ciento, según un informe del Ministerio de Economía.

Arce dijo que "no le preocupa" el ligero incremento que sufrió la mora bancaria en los últimos tres años, de 1,3 por ciento a 1,7 por ciento, como advirtió la Asociación de Bancos Privados de Bolivia (Asoban), tomando en cuenta que en 2005 ese porcentaje llegaba a 10 por ciento.

Asimismo, manifestó que la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI) está vigilante ante alguna variación importante de la mora, que evidencie la necesidad de tomar medidas sobre el sistema financiero.

Desde el año 2006, la política de bolivianización, coordinada entre el Órgano Ejecutivo y el Banco Central de Bolivia (BCB), consiste en la apreciación de la moneda nacional, ampliación del spread cambiario (diferencia entre el precio de compra y el de venta de un activo financiero), modificaciones al encaje legal, reformas al impuesto a las transacciones financieras, además de las campañas informativas realizadas para el efecto.

Entre enero de 2006 y diciembre de 2015, Bolivia logró romper la hegemonía del dólar estadounidense e imponer su moneda en un promedio del 89 por ciento en créditos y depósitos, como producto de su política denominada bolivianización, que busca dejar la dependencia externa, mantener la estabilidad financiera y enfrentar la inflación importada.

Además, busca mantener un promedio de 1,5 por ciento de mora bancaria.