BEIJING, 14 mar (Xinhua) -- Mientras que algunas personas pueden estar preocupadas por que la desaceleración de la economía china debilite el crecimiento global, la actual reestructuración económica ha sido aplaudida por compañías y particulares extranjeros.
Una de las áreas principales para las compañías extranjeras es el cine. La película de animación "Zootrópolisa" domina las pantallas de China, con una taquilla de 400 millones de yuanes (61,5 millones de dólares) desde su estreno el 4 de marzo, según la empresa de análisis de mercado Entgroup.
Las ventas de entradas de ocho taquillazos de Hollywood superaron los 100 millones de dólares cada uno en China en 2015, llegando a 1.400 millones de dólares en total, un incremento del 84 por ciento frente al año anterior.
Las películas de Estados Unidos reciben una calurosa acogida por parte de los espectadores chinos, cada vez más dispuestos a gastar en entretenimiento y ocio y con mayor capacidad financiera para hacerlo.
Los ingresos disponibles per cápita de China crecieron un 8,9 por ciento interanual en 2015, de acuerdo con el Buró Nacional de Estadísticas. El coeficiente de Engel, que mide el gasto en alimentos como proporción del presupuesto doméstico total, cayó por tercer año consecutivo para situarse en 30,6 por ciento.
Los consumidores de China, cada día en mejor situación financiera y más exigentes, también tienen más ganas de comprar productos de alta gama, particularmente en el terreno de la salud.
Los ciudadanos urbanos gastaron un 7,5 por ciento de su presupuesto diario en atención sanitaria, sólo por detrás de los alimentos, de acuerdo con la Comisión Nacional de Salud y Planificación Familiar.
La necesitad de materiales más sanos ayudó a la compañía química estadounidense Eastman a consolidarse en China a través de un acuerdo con el fabricante de electrodomésticos Midea el mes pasado.
El trato permite que Midea use "Tritan", una marca de plástico sin bisfenol A, una sustancia prohibida en el embalaje de alimentos y la fabricación de biberones en muchos países desarrollados, pero todavía utilizada comúnmente en las naciones en vías de desarrollo.
De acuerdo con el informe sobre la labor del gobierno, presentado por el primer ministro, Li Keqiang, el 5 de marzo, China continuará impulsando la reforma estructural por el lado de la oferta en 2016, con el fin de mejorar la calidad y la diversidad de los productos y servicios en el mercado para satisfacer la creciente demanda de los consumidores.
"Esta tendencia de consumo en China y la campaña del gobierno de reforma por el lado de la oferta crearán enormes oportunidades de negocio para los inversores tanto nacionales como extranjeros", dijo el vicepresidente de Midea, Yuan Liqun, durante la actual sesión parlamentaria anual del país.
La exportación de capacidad de producción industrial de China y las estrategias de internacionalización de las empresas también han beneficiado a los extranjeros.
El fabricante de vidrio para coches Fuyao Group está revitalizando una planta de automóviles cerrada por General Motors (GM) en Dayton, Ohio, Estados Unidos, en medio de la crisis financiera en 2008 que causó el despido de miles de trabajadores locales.
En enero de 2014, Fuyao Group le compró la fábrica a GM, invirtiendo 200 millones de dólares y equipando la planta con líneas de producción de vidrio de última generación.
La fábrica alcanzará su plena capacidad en 2016, produciendo 4,5 millones de juegos de partes de vidrio para automóviles por año y empleando a más de 1.500 obreros locales.
Según los datos del Ministerio de Comercio, las compañías chinas invirtieron 735.000 millones de yuanes en el extranjero en 2015, un aumento del 14,7 por ciento frente a 2014.
El informe sobre la labor del gobierno indica que China continuará apoyando a los inversores chinos para que exploren el mercado global y ayudando en la exportación de capacidad de producción.
"La cooperación es mutuamente beneficiosa", dijo el portavoz de la cartera, Shen Danyang, agregando que las empresas chinas contribuirán a la economía local y mejorarán la vida de la gente.
El crecimiento del PIB de China se ralentizó hasta el 6,9 por ciento en 2015, lo que provocó la preocupación de algunos inversionistas exteriores en relación con la contracción de las oportunidades de negocio o incluso de un "aterrizaje forzoso" de la segunda mayor economía del mundo.
"Existen desafíos para las autoridades chinas, pero no observamos algunas de las extremas situaciones de caída", dijo Maurice Obstfeld, consejero económico y director del departamento de investigación del Fondo Monetario Internacional.
China contribuyó con más del 25 por ciento al crecimiento económico mundial el año pasado, dijo Xu Shaoshi, director de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma.
"China no exporta la recesión. Más bien, sigue siendo una fuerza propulsora para la recuperación global", señaló.