VARSOVIA, 19 jun (Xinhua) -- Es sábado por la tarde y un tren de carga que transporta decenas de contenedores entra en la estación de un parque logístico ubicado en la ciudad polaca de Lodz, pitando a los que están a la espera de su llegada.
El tren, que forma parte de los servicios ferroviarios de carga China-Europa, ha tardado más de 10 días en llegar a su destino, desde su partida de Chengdu, una ciudad del suroeste de China.
Cada semana, dos trenes de esta naturaleza, cargados de mercancías chinas, en su mayoría productos electrónicos y piezas de maquinaria, arriban al referido parque, operado por la principal empresa logística de Lodz, Hatrans. Y posteriormente, regresan a China llenos de bienes europeos.
"Un creciente número de compañías polacas, en especial los fabricantes de alimentos, nos piden llevar sus productos a China", dice Krzysztof Janeczko, un ingeniero que trabaja en el parque logístico.
"Es agradable hacer negocios con la gente china", comenta Janeczko, que ya lleva más de cuatro años participando en este servicio ferroviario.
El servicio de transporte ferroviario transcontinental comenzó en 2011. Actualmente, operan 20 trenes programados entre los dos continentes y casi todos ellos pasan hacia el oeste de Europa vía Lodz, en el centro de Polonia.
En Polonia termina el viaje de dos de esos 20 trenes, uno que sale de la ciudad de Chengdu y el otro de la oriental de Suzhou, con destino a la capital polaca, Varsovia.
Janeczko observa un gran potencial en los servicios ferroviarios de carga, que son más eficientes en cuanto a la relación coste-tiempo en comparación con otros medios de transporte. Se estima que el transporte en tren puede ahorrar hasta dos tercios del tiempo que usa el transporte por mar, así como las cuatro quintas partes del coste del transporte por aire.
Mientras señala con el dedo a los contenedores con logos de China que se amontonan en ambos lados de una línea férrea que atraviesa el parque logístico, Janeczko anticipa que los servicios ferroviarios de carga pueden dar un gran incentivo al comercio bilateral.
Gracias al servicio de trenes, el comercio entre Polonia y la provincia china de Sichuan, cuya capital es Chengdu, ha crecido de manera notable. Según los datos ofrecidos por la embajada de China en Varsovia, las exportaciones polacas a Sichuan se incrementaron en un 36 por ciento en 2015.
Janeczko tiene la convicción de que la próxima visita a Polonia del presidente chino, Xi Jinping, inyectará mucho más vigor a los vínculos comerciales bilaterales.