Por Paul Martin
Hangzhou,02/09/2016 (El Pueblo en Línea) - El Grupo del G20, creado después de la crisis financiera de 2008, es una plataforma clave para la cooperación económica internacional que marca el importante progreso de la gestión económica mundial. Sin embargo, las cumbres anteriores no cumplieron con las expectativas en términos de superar el estancamiento de la economía. Por lo tanto, en la Cumbre del G20 d este año hay muchas expectativas, dada la difícil situación económica actual.
Estoy muy contento de ver que el G20 se está desarrollando por el camino correcto durante la presidencia de China. China ha hecho un trabajo notable en la preparación de la Cumbre de Hangzhou.
Un hecho importante en el G20 son los contactos que ha realizado China como país anfitrión con los otros miembros del G20. China ha hecho un buen trabajo en términos de organización de reuniones entre centros de estudios estratégicos y ministros. Estoy seguro de que la reunión de China será todo un éxito.
La Cumbre del G20 de Hangzhou es una reunión importante por muchas razones. En primer lugar, China es una de las economías más importantes del mundo, por lo que cuando un país de este tamaño organiza una Cumbre del G20, crece el peso e importancia de la misma. Además, China ha iniciado una serie de debates sobre varias cuestiones importantes para preparar los resultados de la Cumbre y traducir los resultados en acciones.
Además, dado el estado actual de la economía, muchas personas piensan que la corriente de la ralentización es una nueva normalidad. Bajo tal contexto, la comunidad internacional espera que la Cumbre de a conocer las soluciones.
La explotación económica de China también amplía nuestras expectativas. La transformación económica del país es una política deliberada en cuanto a la búsqueda de crecimiento interno. Dada la desaceleración económica mundial y la importancia del crecimiento económico, la inversión en infraestructura y educación es absolutamente crucial si queremos que la economía mundial prospere. China también ha mostrado un liderazgo considerable en este campo y la creación del Banco Asiático de Inversión en Infraestructura es un ejemplo.
El G20 también debería centrarse más en las cuestiones globales que influyen en el desarrollo económico, como la cuestión de los refugiados, el papel de África, el desarrollo sostenible del mar, la corrupción y el cambio climático. Con el fin de resolver estos problemas, es muy importante poner énfasis en las instituciones multilaterales como el FMI y la OMC.
Además, es aconsejable que China invite a los líderes de países africanos como Egipto, Chad y Senegal a la Cumbre del G-20. La población más joven está en África. Es para beneficio de todos dar a esa población joven la oportunidad de desarrollar y construir.
La intención original del G20 era hacer frente a los retos económicos a los que se enfrenta el mundo, pero el problema de las cumbres anteriores es que los acuerdos alcanzados por las partes no siempre se cumplieron. Tengo grandes expectativas, y estoy muy seguro de que China estará a la altura del desafío. También estoy deseando ver la cooperación entre China y Canadá en el marco del G20.
(El autor es el ex primer ministro de Canadá y ministro de Finanzas)