Italia celebrará el 4 de diciembre un referendo nacional sobre una reforma constitucional, anunció hoy el gabinete italiano.
La cita política es considerada crucial, dado que el futuro del gobierno de centro-izquierda del primer ministro Matteo Renzi depende de su resultado.
La reforma fue aprobada en abril por el Parlamento, luego de seis lecturas consecutivas en ambas cámaras; en Italia se requiere un proceso de aprobación especial para cualquier disposición que busque enmendar la Constitución.
También se necesita una consulta popular para confirmar o rechazar la ley de reforma debido a que durante las votaciones parlamentarias no se alcanzaron las mayorías calificadas necesarias.
De aprobarse en el referendo, la reforma transformará profundamente el perfil institucional y el proceso de adopción de leyes en Italia.
La reforma propone desechar el llamado sistema de "bicameralismo perfecto" que ha estado en vigor en el país desde que la Constitución entró en vigor en 1948.
El Senado será degrado a una asamblea a cargo de asuntos regionales y será despojado de su actual estatus equitativo al de la Cámara de Diputados en cuanto a la elaboración de leyes. El Senado perdería la facultad de votar el presupuesto y otras leyes y de derribar el gabinete con votos de no confianza.
Sin embargo, el Senado mantendría sus prerrogativas sobre leyes constitucionales y electorales, así como sobre los tratados europeos.
Los escaños de la asamblea serán reducidos de los actuales 315 a 100. Los futuros senadores serán elegidos entre los integrantes de las asambleas regionales y los alcaldes y desempeñarán el cargo sin recibir salario.
De acuerdo con el gabinete, la reforma incrementará la estabilidad del sistema político fragmentado de Italia y mejorará la eficiencia de las instituciones en general al racionalizar el proceso de elaboración de leyes.
El procedimiento legislativo será acortado, dado que la mayoría de las iniciativas no tendrán que pasar de una cámara a la otra hasta que ambas estén de acuerdo en un texto idéntico, como ocurre actualmente.
El gabinete también será reforzado a expensas del Parlamento, dado que sólo necesitará el voto de confianza de la Cámara de Diputados.
No obstante, la enmienda constitucional ha generado mucha controversia en el país y grandes sectores de la sociedad y algunas fuerzas opositoras han fijado su postura en contra.
Desde el año pasado, Renzi ha declarado en repetidas ocasiones que dimitirá si el resultado es negativo, lo que ha contribuido a "personalizar" la votación.
En un principio, fuentes del gobierno dijeron que el referendo se realizaría en octubre.
El gabinete decidió aplazar el referendo hasta principios de diciembre para ganar más tiempo y para persuadir al electorado dubitativo, indicaron medios locales.