Por Pau Ramírez
RIO DE JANEIRO, 14 oct (Xinhua) -- Hace unos cuatro años, Bruno Mariano e Silva hizo una de sus habituales compras por internet mediante una conocida tienda virtual brasileña. Aunque aquella vez notó algunas pequeñas diferencias.
"El paquete tardó un poco más de lo normal en llegar, y cuando llegó, vi que tenía unas letras en chino. Nunca antes había recibido nada así", explica Bruno añadiendo que decidió investigar los motivos.
Descubrió que la página web desde la que él compraba realizaba "la compra en Ali Express y colocaban mi dirección como destinatario", es decir, que él compraba a un mero intermediador, comenta el psicólogo brasileño de 36 años.
Fue así que descubrió el portal de compras online Ali Express, propiedad del grupo chino Alibaba, que ya ha pasado a ser una referencia en el mercado online brasileño. "Cuando descubrí qué era Ali Express, pasé a comprar allá directamente", recomendándoselo a varios amigos que ya lo utilizan.
Fue también por casualidad que Felipe Nascimento Lima, de 31 años, descubrió la famosa tienda electrónica china "a través de un reportaje en internet, en un artículo que leí que hablaba de la fiabilidad del servicio".
"Me arriesgué a comprar. Debe hacer unos 3 años y medio. Hice la primera compra, y tardó un poco en llegar pero el valor era interesante y desde entonces, pasé a utilizar Ali Express", explica Felipe, quien trabaja como gestor público.
Esta nueva forma de compras electrónicas ha cambiado mucho la impresión que tienen los brasileños de los productos y servicios chinos, y el éxito de Ali Express en el país latinoamericano lo muestra el hecho de que la aplicación para teléfonos y tabletas en GooglePlay, lanzada en 2014, se situó recientemente entre las cinco más descargadas en el país.
Otro de los aspectos positivos sobre el servicio, son los pocos problemas registrados, a diferencia de otras tiendas virtuales parecidas.
Bruno señala que aunque el plazo de entrega es algo mayor, la experiencia como comprador es mejor en la página de comercio china. "De manera general puedo decir que tuve muchos más problemas comprando cosas online en Brasil que en Ali Express".
El brasileño añade que de entre las casi 200 compras que ha realizado en Ali Express solo una le ha dado problemas, "las otras veces que el producto se extravió o que no quedaban más productos, me reembolsaron el importe".
La experiencia de Felipe es parecida. "Puedo decir que el 95 por ciento de las veces lo recibí todo perfecto y el otro 5 por ciento no llegaban pero conseguí recibir el dinero de vuelta abriendo una reclamación. El único problema que le veo es el plazo de entrega, que es de hasta 90 días, pero el valor de los productos es interesante, y la variedad es muy grande, encuentras de todo".
Una de las cosas que más valora Bruno del servicio es el hecho que el dinero del cliente se quede en Ali Express y no vaya directamente a las manos del vendedor, con lo que se evitan posibles casos de estafa o fraude.
"Si el vendedor no manda el producto o lo manda errado, me reembolsan, y esto me da seguridad", comenta, a la vez que valora el trato directo con el vendedor.
"Cuando empecé a comprar en Ali Express, no había nada igual, el sistema que tienen de mensajes, de hablar directamente con el vendedor y que él te pregunte sobre la talla de una camisa, recordándote que las medidas allá son diferentes, etc.", afirma Bruno.
Felipe, por su parte tuvo una mala experiencia, en la que su cuenta de Ali Express resultó pirateada, "alguien la usó y compró equipamientos de esquí, piezas de ordenador, un disco duro externo ... y lo enviaron a Londres. No sé como lograron hacer las compras porque a mi no me cobraron nada en mi tarjeta de crédito, pero quien lo hizo recibió los productos", explica.
Al intentar entrar en su propia cuenta tiempo después, sin éxito, Felipe cree que fue "la propia empresa la que avisó a mi banco para que no me cargaran más en la tarjeta de crédito. Me parece muy interesante la seguridad que ofrece la compañía porque sientes que estás respaldado" por el propio Ali Express, explica el brasileño.
Aunque distancia entre China y Brasil hace que el periodo de entrega de los productos se alargue, tanto Felipe como Bruno dicen que la demora se compensa por el buen servicio que se ofrece.
El hecho de que productos de un país tan geográficamente alejado ya entren en el mercado brasileño y faciliten la vida cotidiana de este pueblo latinoamericano supera la distancia entre Brasil y China. A medida que se profundice la iniciativa china de la Franja y la Ruta, esta distancia se reducirá aún más en el futuro.