México fortalece acciones en favor del cuidado de zonas forestales

Actualizado a las 05/12/2016 - 15:44

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El gobierno de México firmó hoy en el marco de la COP13 en el balneario mexicano de Cancún, un acuerdo para evitar que zonas forestales del país se conviertan en espacios de agricultura o ganadería.

El acto se realizó en el Centro de Convenciones del municipio de Cancún en estado de Quintana Roo (sureste) durante los trabajos de la 13 Conferencia de las Partes (COP13) sobre Biodiversidad de Naciones Unidas (ONU).

El documento fue signado por los titulares de la Secretaría (ministerio) de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa), José Calzada; y de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Rafael Pacchiano.

El acuerdo busca garantizar la productividad agropecuaria, pero sin afectar los bosques y la biodiversidad, mediante la aplicación de acciones transversales que privilegien el cuidado del medio ambiente y la sustentabilidad.

Calzada dijo que esta iniciativa permitirá, por primera vez en el país, desarrollar un plan de trabajo conjunto para que ambas entidades y sus organismos desconcentrados, coordinen trabajos para evitar que zonas forestales se conviertan en espacios de agricultura o ganadería.

Contará con un eje rector que impulse la productividad agropecuaria sin afectar los bosques y la biodiversidad.

"Esta es un respuesta del Estado mexicano a la conservación y preservación, y un mensaje de que sí queremos producir más alimentos, pero no a costa de la biodiversidad del país", señaló.

Agregó que también "es una referencia a otras naciones para hacer compatible el desarrollo económico de nuestra gente en las actividades agropecuarias, con la preservación del medio ambiente".

Precisó que entre las líneas de acción está la identificación de productores y agroempresas que hayan ampliado sus superficies agrícolas o ganaderas con la afectación de zonas forestales.

La finalidad es negarles la inscripción en los programas de incentivos y apoyos productivos, así como la incorporación a esquemas de comercialización o la certificación para la exportación de sus productos.

El titular de Sagarpa detalló además que en coordinación con la banca de desarrollo en el sector agropecuario, se establecerán candados para evitar el otorgamiento de incentivos económicos, financiamientos o créditos a solicitudes de proyectos que tengan la intención del traslado de tierras forestales a tierras agrícolas.

A manera de ejemplo dijo que estas prácticas se llevan a cabo con la siembra de aguacate en el estado de Michoacán (oeste) y de palma de aceite en el estado de Chiapas (suroeste).

Se trata de actividades propiciadas por tener un mayor beneficio en el otorgamiento de incentivos productivos y rentabilidad, en comparación con los pagos por servicios ambientales otorgados por instancias federales y estatales.

Agregó que ambos cultivos ya cuentan con un censo oficial que determina que para el caso del aguacate se tienen plantadas 175.000 hectáreas, principalmente en Michoacán, y 80.000 hectáreas de palma de aceite en Chiapas.

Por su parte, el ministro Pacchiano explicó que en la actualidad los incentivos otorgados por la cartera de Agricultura para actividades agrícolas superan los pagos por servicios ambientales que otorga la Comisión Nacional Forestal (Conafor), lo que hacía "muy difícil el cuidado de las zonas forestales".

Dijo que a partir de este acuerdo, la coordinación entre ambos ministerios permitirá no obstante estar "en condiciones de poder cumplir el compromiso que México adquirió en el Acuerdo de París (2015) de lograr una tasa cero de deforestación".

Recordó que uno de los propósitos de la administración del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, es detonar la industria forestal en México y que se convierta en una potencia mundial en la materia.

Pacchiano expresó que esta acción conjunta "es un ejemplo de cómo se puede integrar el sector de la agricultura a las tareas de conservación de la biodiversidad, como lo propuso México por primera vez en esta Conferencia de Naciones Unidas".

El nuevo convenio establece entre otros puntos, líneas de acción conjuntas para proteger e incrementar la superficie del territorio mexicano bajo modalidades de conservación, buenas prácticas productivas y manejo regulado del patrimonio natural.

Contempla, además, promover la generación de recursos y beneficios a través de la conservación, restauración y aprovechamiento del patrimonio natural, con instrumentos económicos, financieros y de política pública innovadores.

Incluyen acciones para focalizar los programas de conservación de la biodiversidad y aprovechamiento sustentable de los recursos naturales, para generar beneficios en comunidades con población de alta vulnerabilidad social y ambiental.

El acuerdo firmado busca también promover el conocimiento y la conservación de la biodiversidad, así como fomentar el trato humano a los animales.